Por The Associated Press
Por The Associated Press

Dos paquetes con explosivos, originarios de Yemen y destinados a sinagogas de Chicago, fueron encontrados jueves por autoridades de Emiratos Árabes Unidos, a bordo de dos aviones de pasajeros. Uno de los dos paquetes estaba escondido dentro de una impresora. Los paquetes recorrieron el Medio Oriente antes de ser detectados: uno de ellos voló desde Yemen a Qatar y luego a los Emiratos Árabes Unidos.

El hallazgo ilustra la persistencia de los problemas de seguridad en el transporte aéreo, a pesar de todas las precauciones. Las bombas eran tan sofisticadas que ni los investigadores en Gran Bretaña las pudieron detectar. Esa complejidad ha hecho que los funcionarios sospechen de Al-Qaeda. UPS y FedEx han decidido dejar de trasladar paquetes desde Yemen.

La estudiante que envió los paquetes fue detenida en Yemen, así como su madre. Sin embargo, quien está ahora en la mira de los investigadores es el fabricante de la bomba, Ibrahim Hassan Al-Asiri, de 28 años de edad y nacionalidad saudí. Hace un año, Al-Asiri envió a su hermano como hombre bomba, en un intento de asesinar a un funcionario del contraterrorismo saudí. La bomba que iba a utilizar llevaba el mismo explosivo que el empleado en la impresora y en el atentado fallido llamado Chrismas Day Attack del año pasado, informó The Washington Post.

Foto: El traslado de los explosivos (Foto: AP)