TOM GROSS

El New York Times desorienta a sus lectores: describió la bomba de autobús en Jerusalén hace tres semanas, como una “pequeña bomba” en la introducción del artículo. Lo que ni el NYT, ni otros medios de comunicación, han dicho a sus lectores es que varios niños israelíes permanecen heridos como consecuencia del ataque palestino QUE CONSISTIÓ EN UN OBUS ANTITANQUE CONTRA UN AUTOBÚS ESCOLAR.

Me gustaría llamar la atención sobre una de ellos en particular, Odelia Nechama de Jerusalem. Su edad: 14 años.

Odelia permanece en estado crítico, en coma, ciega de ambos ojos, y con terribles quemaduras en todo su cuerpo.

Odelia era una niña cariñosa y feliz que se encontraba caminando junto al autobús, de camino a casa, cuando la bomba explotó.

Por lo que puedo ver, no sólo no ha sido Odelia mencionada una sola vez en un periódico internacional, sino tampoco en medios israelíes.

Entre otras personas que resultaron heridas en ese ataque fueron: Natan Daniel, de 17 años, quien sufrió lesiones internas masivas y se le removieron órganos internos; Leah Bracha, 19 años, quien sufrió quemaduras en piernas y brazos; Shilo ben Ofra, de 15 años, con quemaduras y fracturas en las piernas y el abdomen inferior; Netanel Ben Shlomit, de 18 años, cirugía para las lesiones en el abdomen; Elhanan Ovadia, de 14, graves lesiones en los pies, podría no volver a caminar; Daniel Ben Nurit, de 13 años de edad, laceraciones y heridas por metralla en pies y piernas; Ben Sasson Shulamit, lesiones en el cuerpo, siendo ésta la segunda vez que Sasson ha sido herido en un ataque terrorista en Jerusalem; y otras personas más.

Entre los heridos en la “pequeña” bomba se encuentran seis estadounidenses. Entre los muertos, una británica – pero no han sido mencionados ni por los medios de comunicación estadounidenses ni por los británicos.

¿Doble rasero?