Entrevista de octubre de 2011

¿Qué hace un colegio judío mexicano para sobrevivir y lograr excelencia académica a pesar de la crisis?

Daniel Smeke, de 45 años, es el nuevo Director General del Colegio Hebreo Monte Sinaí y aporta al colegio un “toque” especial.

Explica que implementó en su colegio varias medidas: el Bachillerato Internacional, un nuevo Departamento de Matemáticas de Excelencia y una estrategia anti bullying.

También habla de la responsabilidad de los padres en cuanto al bullying a niños de familias menos favorecidas económicamente.

ENLACE JUDÍO: ¿Qué hace un colegio judío para sobrevivir y lograr la excelencia académica a pesar de la crisis?

DANIEL SMEKE: Me parece que es una meta ambiciosa, pero, para lograrlo, el Colegio Hebreo Monte Sinaí tiene que ser no sólo el mejor colegio de la red, sino el mejor colegio de México- y si no lo tenemos claro no llegaremos a este objetivo.

Sé que es algo ambicioso y que a algunas personas les podrá causar hilaridad, pero estoy convencido de que este va a ser el mejor colegio de México; si no estuviera convencido yo (y mis directivos) ¿ cómo convencer a mis queridos alumnos y a mi comunidad estudiantil?. A mí me queda claro que tenemos todo para convertir este colegio en el mejor de México.

EJ: ¿Cuál es el camino?

DS: El camino era el principio, tener una misión y una visión, que el colegio ya tiene; ahora nos tenemos que apegar a esa misión y a esa visión y contamos con el material humano suficiente para llevarlas a cabo y lo que platicábamos, pasar de esa etapa en donde las personas son importantes para la institución pero lo más importante es la institución como tal.

EJ: Según tú, ¿cuáles son los problemas de la educación judía en México?

DS: Creemos que, por ser una institución judía, estamos peleados con la excelencia académica; pero me parece que podemos ser una institución como dice nuestra misión: apegada a una sólida formación judeo – mexicana pero, a la par, encaminados a lograr una excelencia académica.

EJ: Una de las crisis de la educación judía en México, dentro de los círculos que ha intentado estudiar este tema, ha sido que los padres sienten que están obligados a ingresar a sus hijos en un colegio de la red judía para mantener su identidad, pero se ha escuchado a veces: “Estamos arriesgando su futuro económico”, dando a entender que la educación no es de la mejor calidad en un mundo globalizado donde tenemos que estar a la altura de las grandes universidades . Pareciera que hay una contradicción entre darles identidad y darles calidad educativa, ¿tú qué opinas?

DS: Creo que es una percepción que sí se tiene, pero es una percepción que tenemos que cambiar en el Colegio y repito, sin ser insistente, pero nuestra misión lo marca claramente, nosotros buscamos ser una escuela incluyente, en la que se creen personas íntegras, responsables con una preparación global y competitiva que asegure la excelencia en un entorno internacional y, obviamente, incluyendo una sólida formación judeo – mexicana. No es sencillo, pero lo vamos a tratar de lograr porque no están peleadas las dos cosas, la identidad y la excelencia académica.

Nos parece que la identidad la tenemos, sólo hay que alimentarla y en eso los padres de nuestros alumnos nos ayudan mucho, cuidan mucho que sus hijos mantengan esa línea de tradición y de identidad que nosotros en el colegio reforzamos con una base muy sólida: tenemos un departamento de Estudio Judaicos muy bien conformado, tenemos el apoyo de la Dirección Adjunta del Moré Moisés Hilu que da credibilidad dentro de la misma Comunidad, para saber que dentro del colegio se están respetando todos los preceptos.

En cuanto a la cuestión académica, es ahí donde yo intervengo más a fondo con mi experiencia y mi formación académica que me permiten sentir que tengo las bases suficientes para llevar al Colegio a este punto de excelencia académica. Podemos platicar de manera extensa acerca de cuáles son las medidas que estamos tomando en cuanto a esta excelencia, pero en resumen y en medidas muy puntuales: estamos tomando evaluaciones externas y evaluaciones internacionales, para, en un principio saber dónde estamos y a dónde queremos llegar.

No tenemos miedo, sabemos que un principio estas evaluaciones no darán exactamente los resultados que queremos, pero no importa, queremos saber dónde estamos parados y en el proceso académico que queremos llevar, ahí es donde se irá cambiando; desde hace un par de años estamos en el proceso de ser un colegio BI (Bachillerato Internacional) lo cual nos acerca los niveles de evaluación extranjera, también nos lleva alinearnos en la línea de la excelencia académica, básicamente estas son las medidas globales que se están tomando.
El BI (Bachillerato Internacional) ya lo tenemos implementado en la educación primaria y en los estudios intermedio está en proceso así como en la secundaria e implementar el diploma de los alumnos que ya están en bachillerato: este diploma le abrirá muchas puertas a los alumnos que lo acrediten a muchas universidades de cualquier parte del mundo. Es algo que no estamos sólo hablando, son medidas que se están tomando para llegar a esa meta de la excelencia.

Tenemos una primicia que no se ha difundido aún por la comunidad, pero estamos prontos a conformar el Departamento de Matemáticas del Colegio Hebreo Monte Sinaí, va a ser un departamento completamente vertical que va a abarcar desde el Kínder hasta Bachillerato para lograr la enseñanza de las matemáticas a un nivel de excelencia.

EJ: La otra parte de la crisis es la de los costos, muchos padres sienten que sacrifican hasta el cuidado de su salud por dar a sus hijos una educación judía, ¿has tomado en cuenta esta vertiente en las autoridades del colegio, piensan hacer algo al respecto?

DS: En un principio, puede sonar contradictoria tu pregunta: tienes poco ingreso por lo tanto ¿cómo se va a lograr la excelencia académica? Aclarando que yo no soy la persona indicada para explicarlo, quiero mencionar que se está trabajando a nivel patronato.

Por otro lado, me parece que cuántos mejores alumnos podamos egresar de nuestros colegios, vamos a revertir esa necesidad económica de las familias. El problema se vuelve un círculo vicioso: no preparo bien a mis alumnos, salen a un nivel profesional en el cual no tienen las oportunidades académicas adecuadas; por lo que su ingreso no es el óptimo. Más adelante, con sus hijos, vuelven a tener esas necesidades económicas.

Si logramos hacer énfasis en ese punto de inflexión y lanzar al mundo alumnos de excelencia con un nivel profesional que les permita tener un ingreso suficientemente bueno, nos traerán a sus hijos sin la necesidad de un apoyo económico; pero, obviamente, esto es un proyecto a largo plazo, pero que estamos seguros que vamos a poder lograr.

EJ: La tercera queja de los padres tiene que ver con el aspecto social, desde el bullying y la imagen del colegio judío mexicano en el que se da preferencia dentro de la sociedad estudiantil a alumnos con mejores recursos económicos y entonces hay personas que se sienten mal por no tener el jeans, la mochila, etc.

DS: Estamos trabajando en eso, primero, cuando mis alumnos entran por la puerta del colegio, son alumnos del Colegio Hebreo Monte Sinaí, no hay discriminación de ningún tipo, somos un colegio incluyente, lo dice nuestra misión: este 4 de noviembre, estamos lanzando con el apoyo de nuestros directores la primera campaña del CHMS contra el bullying, algo que está diseñado por los psicólogos, los orientadores y los directores del Colegio. Es un programa integral y el slogan es: “Un día sin bullying”.

EJ: ¿Cómo resolver el “bullying económico” que afecta a los alumnos de las familias menos favorecidas desde le punto de vista monetario?

DS: El problema no es sólo del Colegio, es del país, un problema mundial. Lo que intentamos es permear dentro de nuestros alumnos que todos somos iguales, que venimos aquí para estudiar, que las bandas económicas no tienen que ser un obstáculo para una Comunidad, para una comunión dentro del aula y dentro de la comunidad estudiantil; aunque sí es un problema que tenemos que combatir juntos con los padres de familia porque hay veces son los mismo padres lo que no nos ayudan mucho en ese sentido.

EJ: ¿Por qué?

DS: Porque se permea esa idea desde casa y combatirla es difícil; pero trabajando con ellos, en conjunto, obtendremos buenos resultados.

EJ: Daniel, ¿eres el típico Director?

DS: No lo soy. Me parece que si algo tenemos que hacer en la vida, en cualquier oficio, es darle nuestro toque personal: tenemos que saber permear nuestra personalidad en el ámbito laboral en el que estamos. Desde los primeros días de clase, dije a varios de mis alumnos: “Si algún día me ven en un cine, en una plaza, en una fiesta, me van a ver tal y como soy en el colegio”.

No puedo ponerme una máscara de Director General cada vez que entre a la oficina del colegio. Claro, tengo una responsabilidad muy grande, pero la tengo que ejercer tal y como he sido durante mis 45 años de vida: si no esto no funciona, estoy tocando un punto muy importante para la educación: la credibilidad.

Si no hay credibilidad, no hay educación, tiene que haber credibilidad tanto del alumno como de las direcciones, de los profesores. La credibilidad es fundamental.

El alumno es demasiado intuitivo e inteligente, si no cree lo que le estás diciendo en el salón de clase, ya perdiste; por ello es trascendente que te crea, y es más fácil que empieces a generar esa credibilidad como individuo y luego la traslades al aula. Esto hace que se lleve un proceso académico más suave: si logro que mis 910 alumnos crean en mí, cuando yo les tenga que pedir algo seguramente lo van a hacer, porque ya tienen un líder que no es líder por imposición o por coerción, sino que lo es por credibilidad y convencimiento.

Me parece que con esto podré sacar el 101% de mis alumnos.

Algunos de los antecedentes más relevantes en la carrera profesional del Ing. Smeke son:

•Licenciatura en Ingeniería Química, con Mención Honorífica.
•Académico de la Universidad Ibero Americana con 25 años de experiencia en el área de matemáticas, finanzas y estudios empresariales.
•Medalla al Mérito Universitario de la Universidad Ibero Americana. (académico más joven en recibir dicho reconocimiento en la historia de la UIA).
•Fundador e Instructor del Programa Alternativo para Emprendedores (PADE) en la UIA, donde se atiende alumnos con discapacidad intelectual.
•Diplomado en Micro – Enseñanza, Trastornos del aprendizaje y Trastornos por déficit de atención con hiperactividad en la UIA.
•Nombrado el académico mejor calificado en la Universidad Ibero Americana por 10 años consecutivos.
•Conferencista en el Primer Foro de Enseñanza de las Matemáticas Ibero.
•Creador del Programa de Vinculación entre la Preparatoria y la Universidad (UIA).
•Fundador de la Escuela de Negocios Activa (ENA).
•Miembro Activo del Consejo Académico de la Escuela de Negocios Activa.
•Creador y Coordinador del Diplomado en Administración Básica de la ENA.