kalonymus2

“Kinderlaj, gedenkt zshe, de gresteh zaj in der velt
iz tuen emetzen a tovah.”

YEHUDIT LEV PARA ENLACE JUDÍO

Parte III

EN LA MEDIDA que los horrores intensifican, Kalonymus Kalman Shapira se muestra menos seguro de sí mismo. La sucesión de sermones termina el shabbat previo al Nueve de Av – en Julio de 1942 – inmediatamente antes del inicio de los transportes masivos hacia Treblinka. En uno de ellos sale su amada hija Rejtje (Rajel-Yehudit), el último miembro de su familia. Eso rompe el espíritu del rebbe. Para sus seguidores, el Admor entra en silencio profundo.

“EN MI VISIÓN, los problemas antinaturales y muertes malas e innaturales que los perversos y malditos asesinatos infligen en la Casa de Israel de fines de 5702, no hay ejemplo anterior en los escritos de los Sabios, y en las crónicas de Israel, y que Dios tenga misericordia y nos salve de sus manos.”

NO HAY MÁS discursos nuevos, aunque añade reflexiones a sermones anteriores. “A fines de 5702, ya no hay nadie a quien amonestar, y no hay corazón que los levante para trabajar y para estudiar Torah…Y solamente es en la redención completa y la resurrección de los muertos que Él puede construir y sanar el edificio destruido.”

KALONYMUS describe la deterioración de la fe en el ghetto. En una de sus últimas pláticas, en la víspera de Purim 5702 (Marzo 1942), intenta alentar a sus seguidores, y habla con franqueza sobre sus propias dificultades, “Y especialmente con los problemas continuando, aun aquel que pueda fortalecerse a sí mismo y al resto de Israel desde el comienzo también está cansado de fortalecerse y cansado de buscar consuelo. Aun si quisiera hacer un esfuerzo y hablar palabras de consolación y fortaleza, no tiene las palabras, porque durante todos estos años ya ha hablado y reiterado todo lo que podía haber dicho, y estas cosas ya se han vuelto irrelevantes y no tendrán efecto en él ni en sus escuchas.”

EL ADMOR transcribe a texto inmediatamente después del final de shabat. Torah Novellae de los Años de Furia, 5700–5701–5702: Este es el título que Kalonymus Kalman da a sus sermones dentro del ghetto. Cuando siente que su vida está en peligro, esconde los manuscritos con lo que más tarde se conoce como el “archivo Ringelblum.”

LA VIDA del Ghetto es registrada por un equipo de historiadores, rabinos, maestros, científicos y trabajadores sociales liderados por el Dr. Emanuel Ringelblum, historiador de Judería medieval Polaca. El comité se llama Oyneg Shabbos (“Deleite de Shabbat”), y coleccionan documentos visuales y textuales que permiten años después contar con detalle la historia del ghetto y sus habitantes. En la medida que se vuelve aparente que todos los actores morirán, su labor se vuelve enteramente de preservación. Ringelblum y su familia son asesinados en 1944, más dos de los tres archivos sobreviven y ahora viven en el Instituto Histórico Judío de Varsovia.

ACTO SEGUIDO a la revuelta del ghetto en 1943, llega la liquidación del remanente de los habitantes. Shapira es deportado al campo de trabajo de Trawniki. Los prisioneros de Trawniki son exprimidos a través del agotamiento y hambre. Quienes no pueden dar más son enviados a exterminio a Treblinka. El Admor de Piasecza recibe una oportunidad de escaparse, que rechaza.

PARA evitar desórdenes como el levantamiento del ghetto y en el campo de exterminio Sobibor (el 14 de octubre de 1943), los Nazis deciden llevar a cabo la Aktion Erntefest (Operación Festival de Cosecha). El 4 de Heshvan 5704 (Noviembre 2, 1943), el Admor de Piasecza, junto con once mil Judíos de Trawniki, es asesinado a balazos.

Esh Kodesh

VARSOVIA destruida, toma años siquiera recolectar las piedras y el concreto desmoronado. Por fines de los años 40, trabajadores levantando los escombros de lo que una vez fue el Ghetto, encuentra enterradas dos latas de leche repletas de manuscritos. Contienen los archivosOyneg Shabes de Ringelblum. También se encuentran los escritos del rabi Shapira.

LA ÚLTIMA voluntad del Admor de Piaseczno es que se envíe a Palestina el material, a su hermano Rabbi Yeshayahu Shapira, uno de los principales pensadores del movimiento Hapoel Hamizrahi, conocido como el Admor pionero. Pero este nunca lo recibe ya que muere en 1945, antes que el archivo Ringelblum es descubierto.

ESCRITO de puño y letra del Admor: “Si Dios será misericordioso y yo estoy entre los Judíos restantes que sobreviven la guerra, pido que por favor me perdonen y me lo regresen todo.”

“POR FAVOR impriman mis folletos, imploro y ruego con todo Judío individual que estudie mis libros. Estoy seguro que el mérito de mis sagrados ancestros de bendita memoria permanecerá a su lado y el de su familia, en el presente y el futuro. Que Dios tenga misericordia en nosotros.”

LOS ESCRITOS de Shapira no son identificados inmediatamente. Pasan años en el Instituto hasta que salen de la oscuridad. Algunos de los estudiantes sobrevivientes saben de la existencia de los papeles. Por fines de los años cincuenta Baruj Duvdevani, entonces director general del Departamento de Información de la Agencia Judía, viaja a Varsovia y localiza los sermones en el archivo. Traslada el material a microfilm y lo lleva a Israel, donde se publica en 1960, bajo el título Esh Kodesh (Fuego Sagrado).”

OTRO DE sus textos, Bnei Majshava Tova (Comunidad Consciente: Una Guía para el trabajo interior – traducido al inglés y con introducción de la Rabina Andrea Cohen -Kiener) es uno de los manuscritos recobrados, y es guía para obtener y mantener la espiritualidad a través de la adversidad y las necesidad físicas.

DURANTE años solo un manojo de jasidim, junto con investigadores del Holocausto, mantienen interés en el material. Los académicos se dan cuenta de su importancia rápidamente. El Dr. Mendel Piekarz, uno de los principales estudiosos del mundo Jasídico en Israel, quien se ha dedicado largamente al Esh Kodesh, explica, “Este es el documento teológico de mayor importancia del período del Holocausto, en el ghetto más grande de Europa. Es la historia de cómo el Admor lidió con la terrible crisis. Y el hecho que sus sermones cubren el periodo de casi tres años también nos permite percibir los cambios que ocurren en el curso del tiempo.”

DICE Piecarz que el Admor vive “Una búsqueda desesperada para comprender el significado de la catástrofe, y elevar el espíritu de los jasidim.”

EL LIBRO no es un diario ni registro de tres años en la vida de un rabino atrapado en la vorágine del ghetto de Varsovia. No es libro sobre el dolor, terror y horror de la agonía, futilidad y pérdida. Es una colección del comentario semanal de la Torah, una meditación en el verso deSh’ma.

ESH KODESH es la colección de claros y concisos comentarios (derashot) de Shabat que son pronunciados en el ghetto de Varsovia de 1940 a 1942.

EL PERÍODO del Holocausto no es tiempo que conduce al pensamiento creativo, especialmente el espiritual. Pasada la guerra, emergen voluminosas cantidades de escritos religiosos y filosóficos buscando asimilar todos los temas que emergen de su enormidad. Virtualmente todos son reflexionados con el beneficio de la distancia. Hay pocos documentos escritos por rabinos de ese tamaño durante el Holocausto.

POR ESTA razón, Esh Kodesh es un logro importante. Trata de temas básicos como la fe, el significado del sufrimiento, el destino del pueblo Judío, la lucha por el bien frente al mal más implacable. Es una ventana única como extendida respuesta dentro del mismo corazón de la oscuridad.

LA TÉSIS revolotea alrededor de un pensamiento: Todo proviene de Dios y todo está ocurriendo a Dios. Dios está al centro y rodea todo. No hay nada más, no hay dualidad. No hay poder del mal, ni insurrección satánica, no hay fuerzas que combaten por la supremacía. Solo hay Dios, y Jesed, bondad amorosa. A veces, esta es insoportable, insufrible, indecible, incontenible – pero solo es siempre la singular bondad amorosa de Dios.

HAY UN pecado considerado imperdonable por el autor de Fuego Sagrado, y las únicas palabras duras las reserva para solo un tipo de persona: aquella que pierde la fe.

EN Esh Kodesh dice Nehemia Polen, “se encuentran las enseñanzas jasídicas clásicas sobre el amor y la esperanza; la presencia inmanente del Divino en toda la realidad; la dignidad humana y la nobleza Judía, la importancia del cuidado y la compasión; y el poder del lenguaje y la creatividad humana….La comunión entre los vivos y los muertos, la contemplativa transmutación del mal hacia el bien, el sacrificio de los Justos en el cielo, y tal vez lo más impresionante, el llanto y el sufrimiento de Dios.”

“¿TÚ TAMBIÉN te alegras en nuestro regocijo: ¿Por qué entonces guardas silencio frente a nuestro sufrimiento? ¿Cuánto tiempo mantendrás en silencio? Ya no tenemos la fuerza para soportar, ni el espíritu para ser fuertes.”

SHAPIRA lucha con los ángeles, y lucha con Dios. Qué fuerza la suya y que prueba tan dura. “¿Por qué,” pregunta, “se castiga al Faraón por ser terco, cuando el texto claramente nos dice que no tiene libre albedrío? Si todo es parte del plan divino, no podemos odiar al Faraón cuando es simplemente mensajero de Dios.”

DICE Avijai Zur, “Solo un creyente, – y cada Judío es un creyente, sea que llame su creencia religión o ateísmo, justicia, socialismo, naturaleza, positivismo, ciencia – solo un creyente que sufre por causa de sus creencias, por causa del Pacto, puede romper en calumnia. El hombre que cuida demasiado su palabra probablemente odia demasiado. “

MEDIDA POR medida, middah k’neged middah: la fe del hombre en Dios causa que los mundos superiores “respondan” con la Fe de Dios en el ser humano. Esta fe puede ser observada en la renovada confianza en el mundo y en la Providencia – aún, y especialmente en momentos de sufrimiento, que se reflejan en la aparente ausencia de Providencia.

EL CONCEPTO de Tziduk HaDin, justifica el derecho de Dios, y obliga a cada individuo a aceptar lo que esté pasando como Justicia Divina. “El Más Alto no ejecuta Juicio sin Justicia, Dios no lo permita.” (Agosto 23, 1941) El dolor es parte del proceso que termina en la emergencia de una nueva vida.

Su Voz, Rescatada

EN AÑOS recientes se ha generado un importante cambio en la actitud pública hacia el Admor de Piaseczno en el movimiento religioso sionista. Los escritos de Esh Kodesh son especialmente promovidos entre estudiantes de las yeshivot hesder (que combinan estudios religiosos y servicio militar en Israel), así como sus libros de las obligaciones y entrenamiento de estudiantes de yeshiva.

EL RABINO Shlomo Carlebach, compositor y cantante que fusiona la cultura de los años 60 con la música jasídica, se cuenta entre los grandes admiradores del Esh Kodesh. Carlebach, quien muere en 1994, relata el encuentro que tuvo con un barrendero de las calles de Tel Aviv.

“CUANDO el libro (Esh Kodesh) sale a la luz, no podía creer su belleza, me atravesó el corazón. Pregunté a todo mundo, ¿Dónde están esos niños? Esos preciosos niños que escuchaban sus enseñanzas cada semana en Varsovia. Me encantaría hablar con ellos. Me dijeron que nadie había sobrevivido.

PERO un día, hace algunos años, caminando por la calle Hayarkon cerca de la playa de Tel Aviv, vi un jorobado, se veía roto y deshecho. Su cara era bella, hermosa, pero su cuerpo era deforme. Barría las calles. Sentí que esta persona era especial, y le dije, “Shalom, que la paz sea contigo.” Me contestó con un fuerte acento polaco, “Aleijem shoolem.” Le pregunté si era de Polonia. Y me dice, “Si, soy de Piaseczno.” ¡No lo podía creer!—Piaseczno. Le pregunte si alguna vez había visto al más sagrado Kalonimus Kalmun, Admor de Piaseczno. Me dijo, “¿Qué quieres decir si lo vi? Fui su alumno desde la edad de cinco hasta que tuve once años. A mis once años, fui a Auschwitz. Era tan fuerte que pensaron que tenía 17. Me dieron de latigazos, y pegaron y patearon y nunca sané—por eso me veo como me veo ahora. No tengo a nadie en el mundo. Estoy totalmente solo. Toda mi familia fue asesinada.”

Y continuaba barriendo las calles de Tel Aviv

LE DIJE, “Mi dulce amigo, sabes, toda la vida he esperado a conocer a una persona que vio al Admor de Piaseczno, a uno de sus niños.” El jorobado me miró “¿Tú piensas que uno puede estar tres años en Auschwitz y todavía recordar las enseñanzas?”

“SI, estoy seguro,” le dije. “Las enseñanzas del Maestro, – ¿cómo las puedes olvidar? Y me dice, espera. Se fue a lavar las manos, se arregló la camisa, se puso el saco, y me dijo otra vez, “¿Realmente quieres escuchar?”

“JURO que compartiré las enseñanzas por todo el mundo.”

Y COMENZÓ: “Quiero que sepas que nunca hubo un Shabbes como este en nuestro pueblo de infancia de Piaseczno. Bailamos, cientos y tal vez miles de niños, y el Maestro cantaba una canción para recibir a los sagrados ángeles, y a la hora de la comida, daba una enseñanza entre los platos. Esto es lo que decía el maestro después de cada enseñanza:

“‘Kinderlaj, gedenkt zshe, de gresteh zaj in der velt
iz tuen emetzen a tovah –

“¡Niños, recuerden! La cosa más grande en el mundo
es hacerle un favor a alguien más.’”

EL CUERPO de Kalonymus Kalman Shapira se extingue en las flamas purificadoras del Holocausto. Su alma se eleva, su sabiduría aguarda bajo tierra esperando las nuevas generaciones. En el perfecto momento de la historia reaparece para incorporarse en un mundo más libre, con nuevos cuerpos receptores, jóvenes, fuertes, visionarios, inspirados, iluminados.

 Y CONTINÚA la evolución, la inevitable evolución
de la que somos parte todos.

Yehudit Lev, 7 Tishrei 5775