mahmud_2065096bKHALED ABU TOAMEH

 

Para entender lo que impulsa a un joven palestino a llevar a cabo un ataque tan mortal, hay que mirar las declaraciones de los líderes de la Autoridad Palestina durante las últimas semanas.

La campaña de incitación anti-israelí alcanzó su pico con el discurso de Abbas en la ONU hace unas semanas, cuando acusó a Israel de librar una “guerra de genocidio” en la Franja de Gaza. Abbas no hizo ninguna referencia a los crímenes de Hamas contra los israelíes y los palestinos.

Sean los que sean sus motivos, es evidente que el hombre que llevó a cabo el ataque más reciente fue influenciado por los  mensajes que Abbas y el liderazgo de la Autoridad Palestina ha estado enviando a su gente.

Mientras los cohetes de Hamás y terroristas suicidas han estado matando a ciudadanos israelíes durante los últimos veinticinco años, la retórica de la Autoridad Palestina no ha sido menos letal.

De hecho, es esta retórica ardiente la que ha creado el ambiente propicio para lanzar ataques terroristas contra Israel, como el ataque que tuvo lugar en Jerusalén el miércoles 22 de octubre.

Jaya Zissel Braun, una bebé de tres meses de edad, fue asesinada cuando un palestino estrelló su vehículo contra una multitud de personas en una parada del tren ligero en la ciudad. Nueve personas resultaron heridas, tres de gravedad, en el ataque.

Una cámara de seguridad grabó a los padres de la bebé de 3 meses de edad, Chaya Zissel Braun, girando su silla de paseo unos 15 segundos antes de que fueran golpeados por el vehículo del terrorista palestino que llevó a cabo el ataque. Fue identificado como Abdel Rahman al-Shalodi, de 20 años de edad, del barrio de Silwan en Jerusalén oriental. Le dispararon en la escena y más tarde murió en el hospital.

 Abbas y la Autoridad Palestina [PA] no pueden evitar la responsabilidad de matar al bebé.

 Para entender lo que impulsa a un joven palestino a llevar a cabo un ataque tan mortal, hay que mirar las declaraciones de los líderes de la AP durante las últimas semanas. Estos son el tipo declaraciones que alientan a los jóvenes como al-Shalodi para salir a matar a los primeros judíos  que encuentre en la calle.

 Estas declaraciones se refieren a tres desarrollos vinculados con el conflicto palestino-israelí: la Operación Margen Protector del verano pasado, las visitas de grupos e individuos judíos a la Explanada de las Mezquitas (o “Noble Santuario”) y judíos que se mudan a apartamentos en el barrio de Silwan, Jerusalén.

 Durante la confrontación militar de 50 días entre Israel y Hamas en julio y agosto, el Presidente de la AP, Mahmoud Abbas y sus altos funcionarios en Cisjordania adoptaron como práctica diaria el incitar a su pueblo en contra de Israel.

 La campaña anti-israelí a la incitación alcanzó su pico con el discurso de Abbas en la Asamblea General de la ONU el mes pasado, cuando acusó a Israel de librar una “guerra de genocidio” en la Franja de Gaza. Abbas no hizo ninguna referencia a los crímenes de Hamas contra los israelíes y los palestinos.

 Ahora que la guerra en la Franja de Gaza ha terminado, Abbas y la Autoridad Palestina han cambiado su objetivo a los recientes acontecimientos en Jerusalem.

 Unos días antes del ataque terrorista en Jerusalén, Abbas denunció enérgicamente a los Judíos que visitan el Monte del Templo llamándolos  “manada de ganado”.

 Abbas dijo a los activistas de Fatah de Jerusalén, que lo visitaron en su oficina, que tienen que hacer un esfuerzo por impedir “por todos los medios”, que “colonos judíos” “profanen nuestros lugares sagrados.”

 Abbas añadió:

 “Tenemos que evitar que entren en el Noble Santuario por todos los medios. Este es nuestro Al-Aqsa. Al-Aqsa es una línea roja: Israel debe ser consciente de que las redadas en curso y los ataques a Al-Aqsa causarán una explosión volcánica en el área que llegará a Israel. Jerusalén es la capital eterna del Estado de Palestina y sin ella, no habrá estado”.

Abbas y su Autoridad Palestina han estado explotando las  visitas de los judíos en el Monte del Templo para incitar a los palestinos contra Israel. Han estado denunciando incorrectamente estas visitas como “asaltos” y “redadas” en los lugares santos islámicos de judíos “extremistas.”

Cuarenta y ocho horas antes del ataque en Jerusalén, Abbas intensificó su ataque retórico sobre Israel con el anuncio de que cualquier palestino que esté involucrado en las transacciones de propiedades con “países hostiles” (Israel) sería castigado a cadena perpetua con trabajos forzados.

El anuncio de Abbas se produjo en respuesta a los informes de que los palestinos habían vendido casas a familias judías en Silwan – el barrio de Jerusalén, donde vivió al-Shalodi. Amenazando con castigar a los palestinos por la venta de propiedades judías, Abbas estaba enviando un mensaje de que se trata de un crimen horrible que no debe pasar sin una respuesta palestina.

Estos son los  tres eventos principales que han sido utilizados por el liderazgo de la AP para incitar a los palestinos.

Por supuesto también está el trágico caso del adolescente palestino Mohamed Abu Khdeir que fue secuestrado y asesinado por extremistas judíos. La Autoridad Palestina también ha aprovechado de ese acontecimiento espantoso para incitar a los palestinos contra Israel.

 Y luego hay otro trágico caso que involucra a una niña palestina de cinco años de edad, Einas Khalil, quien murió después de ser golpeada por un coche conducido por un colono judío en Cisjordania el 19 de octubre. La AP también ha utilizado esta tragedia como parte de su campaña anti-israelí.

 Las palabras de la AP no han caído en saco roto. Varios barrios de Jerusalén oriental ya están siendo testigos de lo que los palestinos llaman una “mini-intifada”: enfrentamientos diarios entre lanzadores de piedras y fuerzas policiales.

 Los palestinos dicen que el hombre que estrelló su coche contra la multitud en la parada del tren ligero de Jerusalén estaba buscando venganza contra “crímenes” israelíes.

 Algunos dicen que llevó a cabo el ataque a causa de la guerra de Gaza; otros dicen que podría estar relacionado con lo que está sucediendo en el Monte del Templo o porque las familias judías recientemente trasladaron sus hogares a su área. Otros afirman ahora que el ataque se produjo en Jerusalén en represalia por el accidente de coche que mató a la niña palestina cuatro días antes.

 Cualesquiera que fueran sus motivos, es evidente que al-Shalodi, el conductor que llevó a cabo el ataque más reciente, estaba influenciado de una manera u otra por los mensajes que Abbas y el liderazgo de la Autoridad Palestina han estado enviando a su gente. A menos que la dura e incendiaria retórica se detenga, los ataques terroristas seguirán.

Fuente:gatestoneinstitute.org

Traducción: Silvia Schnessel