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Tras intensos choques verbales entre los miembros de la coalición, el gobierno de Netanyahu aprobó la ley básica que proclama a Israel como la nación del pueblo judío con 14 votos a favor y 7 en contra.

Todos los ministros del partido Yesh Atid se opusieron a la ley al igual que la Ministra de Justicia Tzipi Livni, mientras que los representantes del Likud, Yisrael Beiteinu y Habayit Hayehudí votaron a favor.

La ley reconoce el carácter judío de Israel, institucionaliza la ley judía como base para la legislación y descarta al lenguaje árabe como idioma oficial además del hebreo. El proyecto de ley pasará a votación de la Knesset en el trascurso de la semana bajo una versión más moderada.

Previo a la votación, el Fiscal General Yehuda Weinstein se opuso al proyecto de ley afirmando que éste presenta dificultades fundamentales que como asesor legal del gobierno no puede aprobar.

Antes de la reunión, Netanyahu comentó que ¨mucha gente desafía el carácter de Israel como estado nación del pueblo judío y que algunos desean crear autonomías en la Galilea y el Neguev, ignorando nuestra nacionalidad.

Pese a que la versión respaldada por Netanyahu no fue puesta a votación hoy, el primer ministro afirmó que la ley del estado judío fortalece el estatus de Israel como estado judío y democrático, así como la igualdad de cada ciudadano ante la ley sin ser discriminado por su religión, origen o género.

En la reunión se presentaron tres iniciativas. La primera, propuesta por el Presidente de la coalición Zeev Elkin sugiere que Israel es el hogar nacional del pueblo judío, reflejando su derecho exclusivo por la auto-determinación de acuerdo a su legado histórico y cultural. La propuesta refuerza los símbolos del estado y considera al hebreo como idioma oficial del estado, mientras que el árabe sólo recibe un estatus especial.

La propuesta de Netanyahu que aún no ha sido formulada no aborda el tema del lenguaje y define a Israel como estado judío y democrático.

Livni propuso otra versión de la ley que enfatiza la igualdad de todos los ciudadanos de Israel ante la ley y, al igual que Netanyahu, ignora la definición de un lenguaje oficial y define a Israel como estado judío y democrático.

En su página de Facebook, expresó su posición ante la votación de hoy: ¨Israel es un estado judío y democrático. Defenderé los valores del Estado de Israel como fueron plasmados en la Declaración de la Independencia y no daré lugar a que se modifiquen. Yo apoyo una ley que se base en estos valores y me opongo a cualquier proceso que los distorsione, como la peligrosa propuesta anti-sionista de Elkin.¨

Los ministros de Yesh Atid y Tzipi Livni criticaron severamente a Netanyahu por promover la ley: ¨Netanyahu propone una ley que arruinará nuestra democracia. Él desea un estado religioso.¨

Por su parte, Yaakov Peri de Yesh Atid afirmó que ¨una iniciativa de esta naturaleza debe ser formulada minuciosamente bajo un consenso, no apresuradamente. No entiendo la urgencia de una ley como esta en una momento tan sensible. Este no es el momento adecuado,¨ concluyó Peri.

Fuente: Ynet.