Liana era una niña italiana cuya familia se vio amenazada por el régimen nazi. Los soldados de la SS llegaron un día a buscar a su padre, pero él logró escapar antes de que lo atraparan.

NADIA CATTÁN PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO- El hombre comprendió que había llegado el momento de reaccionar y ponerse a salvo.

A sus escasos cinco años, Liana y su hermano fueron resguardados en la casa de unos desconocidos; se trataba de Antonio Aldrovandi y su esposa Giulia Porta, ejemplares ciudadanos italianos que se dedicaron a esconder a dos niños judíos mientras las garras del nazismo amenazaban constantemente; acción por la cual obtuvieron el premio “Justos entre las Naciones”.

Sus nombres se encuentran hoy en un espacio especial de Yad Vashem.

Liana recuerda un terrible detalle:”Cuando por fin me reuní con mi padre, no lo reconocí”.

Afortunadamente, la historia de Liana es una historia con final feliz, gracias a la reacción de sus padres y a la benevolencia de dos desconocidos.