La educación es el futuro de nuestro mundo. Se sabe que los niños aprenden a través del ejemplo, debido a que sus cerebros emulan lo que ven.

Este vídeo que ven a continuación es real.

Se trata de una celebración palestina, en la que los niños celebran su graduación con un ejercicio militar, representando la forma palestina de luchar: mediante atentados terroristas.

En el mundo occidental, la cultura empuja a los padres a esforzarse por darle una educación de calidad a sus hijos, para que ellos puedan realizarse y vivir de una manera completa; por ello, se nos complica demasiado entender cuando una persona manda a sus hijos a morir en nombre de algo y lo hace para alcanzar una “paz” – personal e ideológica, no con alguien más, sino a pesar de los demás.

El conflicto israelí-palestino es una batalla que lleva ya más de una década y cada vez es más complicado entenderla, pero ¿por qué?

Desde nuestro punto de vista, cualquier conflicto que se presenta se soluciona una vez que las dos partes llegan a un acuerdo sobre la discusión y se dividen el elemento en disputa (la tierra, los recursos materiales, los recursos monetarios, etc). El problema es que su conflicto no trata de las tierras, ni del dinero o de los recursos materiales, sino de exterminar a un enemigo y para ello, es justificable mandar a sus hijos a inmolarse con bombas, con tal de lograr su objetivo.

Desde un punto de vista occidental, no entendemos por qué no funcionaría mejor ser tolerante y aprender de la diversidad, en lugar de eliminar a todo aquel que no comparta mi ideología.

Para entender cómo hay personas que se convierten en soldados kamikaze, cuyo único objetivo es matar, tendríamos que entender la educación que se da a los niños palestinos crea una lógica donde morir en nombre de D-os, acabando con el enemigo, es recomendable y honroso.

Vestidos con uniformes militares, los niños de no más de 6 años de edad, toman rifles de juguete para demostrar cómo se invade una base militar de las Fuerzas de Defensa Israelí, paso a paso.

Desde secuestrar prisioneros israelíes, hasta disparar morteros y misiles, pasando por  atacar a los asentamientos cerca de Gaza y plantar explosivos.

El odio se ha vuelto parte esencial de la educación palestina y así crecen los niños palestinos: con una perspectiva agresiva del mundo, en la que está justificado matar para cumplir con su “deber como palestinos”.

Uno de los papeles representados dentro de la graduación, es el de un niño que posó como Imam dando un sermón, quien también representa un símbolos de poder dentro del islam; es quien incita a matar en nombre de la liberación.

Es impresionante que inclusive aunque ellos grabaron el vídeo en Full HD y lo publicaron en Youtube, el mundo sigue pensando que es válido educar a niños para que maten y considerar válida su lucha a favor de la liberación.

La única manera de detener este tipo de educación es enseñarle a los niños que una lucha por la libertad no trata de quien odia más o quién puede causar más daño, sino que debe de mantener una línea moral, en que la sangre no tenga que ser derramada.

El terrorismo no justifica la lucha de liberación. Y la educación que se les da a los niños, no detendrá su odio y terrorismo aunque termine el conflicto.