THE WALL STREET JOURNAL

El Estado Islámico cometió o inspiró indirectamente al menos 393 ataques en 16 países durante el mes de Ramadán, dijo el viernes el jefe de contra-terrorismo de las Naciones Unidas.

Ramadán es el noveno mes del año musulmán, durante el cual es observado ayuno estricto desde la salida del sol hasta su puesta. Los militantes islámicos consideran a Ramadán el período más sagrado para actos de martirio.

A pesar de haber detenido o revertido su expansión territorial, es probable que el Estado Islámico continúe tales ataques a medida que se transforma de una organización militar en una “verdadera organización terrorista”, dijo Jean-Paul Laborde, jefe del Directorio del Comité Ejecutivo de Contra-terrorismo de la ONU.

La mayoría de los ataques en Ramadán, entre el 6 de junio y el 5 de julio, tuvieron lugar en Irak y Siria, dijo Laborde.

Uno de los ataques ocurrió en Estambul el 28 de junio, cuando atacantes suicidas atacaron el aeropuerto más concurrido de Turquía, matando a 41 personas e hiriendo a docenas más. El primer ministro turco, Binali Yildirim, culpó al Estado Islámico por el ataque.

No hay dudas que la amenaza del terrorismo sigue siendo persistente y lamentablemente creíble como quedó demostrado en muchos lugares,” dijo Laborde. “El mundo no se está volviendo un lugar más seguro.”

A fines de mayo, el Estado Islámico instó a sus partidarios a intensificar los ataques contra el Occidente.

“Ramadán está sobre nosotros, el mes de invasiones y yihad… el mes de conquistas. Así que estén listos y preparados. Inclínense a pasarlo como un conquistador en el nombre de Dios”, dijo Abu Mohammed al-Adnani, portavoz y alto líder del Estado Islámico, en una declaración que fue subida online. Él imploró a los partidarios a hacer de Ramadán “un mes de destrucción contra los infieles en todas partes, especialmente contra soldados de los infieles en Europa y Estados Unidos.”

Traducido por Marcela Lubczanski para Enlace Judío México