MARTA SADER

Hoy Akhzivland es tan popular que su fundador ha construido un hotel y un cámping.

Eli Avivi, un judío de origen iraní, llegó un buen día de principios de los 60 a un agradable enclave cerca de la frontera líbano-israelí, cerca del Mediterráneo. Decidió quedarse a vivir allí, de modo que construyó su casa.

Durante diez años, el gobierno israelí estuvo haciendo la vista gorda sobre su situación irregular, pero a partir de 1970, intentó echarle. Avivi, entonces, se fortificó en su hogar y convocó a los medios para dar una rueda de prensa, declarando la creación del Estado de Akhzivland con él como presidente, y creando posteriormente una bandera, un escudo y un himno, así como su propio sello para pasaportes.

achzibland

Gracias a su carisma, este judío acabó convirtiéndose en una celebridad, lo que le valió un acuerdo con Israel, que le arrendó el territorio durante 99 años y lo promovió como destino turístico.

Hoy Akhzivland es tan popular que Avivi ha fundado un hotel y un cámping, además de un museo sobre su pequeño “país”.

Fuente:lapatilla.com