MATTHEW FUTTERMAN

El nuevo documental de Dani Menkin, “En el Mapa”, recuerda cómo el triunfo en 1977 del equipo de básketball Maccabi Tel Aviv galvanizó a Israel.

Los deportes y películas deportivas están en su mejor momento cuando los jugadores involucrados comprenden que algo mucho más grande que apenas un juego está en la línea.

El cineasta israelí Dani Menkin prueba esto con su documental “En el Mapa”, la historia del equipo de basketball Maccabi Tel Aviv de 1976-77. El equipo ganó para Israel su primer campeonato europeo de basketball y cambió para siempre la visión de su país por parte de los israelíes y su proeza deportiva. Se estrenó en Los Ángeles el mes pasado y se estrena el viernes en New York.

Menkin era un niño en Tel Aviv cuando la ex estrella universitaria estadounidense Tal Brody llevó al Maccabi al pináculo del basketball europeo. Él vio a los israelíes salir a las calles para celebrar la asombrosa victoria sobre el equipo CSKA Moscú de Rusia.

“Todos recuerdan donde estaban cuando Tal Brody dijo que estamos en el mapa y estamos aquí para quedarnos”, dijo Menkin en una entrevista reciente desde Los Ángeles, donde vive ahora. La cita exacta, entregada por un Brody delirante después del golpe de 91-79 a los rusos el 17 de febrero de 1977, en un pequeño gimnasio en Bélgica, fue: “Estamos en el mapa. Y nos estamos quedando en el mapa—no sólo en deportes sino en todo.”

Brody eligió al basketball israelí por sobre la NBA en 1966. En un viaje posterior a la universidad, se enteró de primera mano que el país, especialmente Tel Aviv, no era un remanso del desierto sino más bien un oasis conmovedor y hedonista.

“La vida social era muy atractiva,” dijo Brody, quien ha vivido en Israel durante la mayoría de los últimos 49 años.

Brody dijo que él nunca planeó hacer una declaración después que el Maccabi derrotó a lo que era esencialmente el equipo del Ejército Rojo ruso —en una época en que Israel y Rusia no tenían relaciones diplomáticas. La victoria “sacó a un país de cuatro o cinco años de duelo”, dijo él. El duelo comenzó después de la masacre de atletas israelíes en las Olimpíadas de 1972 y se profundizó después de la Guerra de Yom Kippur de 1973, cuando murieron más de 2,600 tropas.

Menkin no podía creer que nadie había hecho jamás una película sobre el triunfo de 1977. Después que Jim Boatwright, un pequeño delantero de Maccabi, murió de cáncer en el año 2013, Menkin decidió que mejor hacía la película pronto. Rastreó a los ex jugadores y adquirió imágenes del juego.

Allí está Moshe Dayan, el líder militar y político con su característico parche en el ojo, pavoneándose dentro del campo para saludar al equipo antes de los juegos en casa. Está el juego real con los rusos cuando 500 judíos en su mayoría europeos compraron todos los boletos y convirtieron lo que se suponía sería un sitio neutral en terreno propio.

Algunas de las trasferencias estadounidenses del Maccabi se establecieron en Israel después de sus carreras, incluido Aulcie Perry, un centro afro-americano de 6.10 pies de Newark, quien se convirtió al Judaísmo. Perry es el Kareem Abdul-Jabbar de Israel, dijo Menkin, y Brody es el David Ben-Gurion de los deportes israelíes. “Después de ellos”, dijo él, “nunca más se trató acerca de perder con honor.”

Fuente: The Wall Street Journal
Traducido por Marcela Lubczanski para Enlace Judío México