La organización que dirige Julian Assange publicó online 8,761 documentos y archivos en los que revela las herramientas de hackeo de la CIA.

WikiLeaks publicó este martes miles de documentos que pertenecerían al Centro de Ciberinteligencia de la CIA, una filtración que aparentemente permite conocer detalles íntimos del espionaje digital de la agencia.

Esto, según declaraciones del portal, es parte de una serie de siete entregas que define como “la mayor filtración de datos de inteligencia de la historia”.

Julian Assange informó en un comunicado que la filtración de este martes es “excepcional desde una perspectiva legal, política y forense”. Y denunció además que “hay un gran riesgo de proliferación en el desarrollo de armas cibernéticas”, que resulta de la incapacidad de las agencias de seguridad para controlarlas una vez las han creado y su “alto valor de mercado”.

Según explica WikiLeaks, esta primera entrega, llamada “Año Cero” y en la que se exponen los sistemas de “hacking”, software malicioso y armas cibernéticas empleadas por la agencia de espionaje estadounidense, comprende 8,761 documentos y archivos, procedentes de “una red aislada y de alta seguridad situada en el Centro de Inteligencia Cibernética de la CIA en Langley, Virginia”.

En esencia, “Año Cero” incluiría toda una serie de armas informáticas para poder hackear teléfonos y dispositivos producidos por compañías estadounidenses, como los iPhone de Apple, el sistema Android de Google, el Windows de Microsoft o los televisores Samsung, que se convertían así en micrófonos encubiertos.