Esta semana se celebran dos eventos que concuerdan al 100% con las vidas de las mujeres paisanas; uno por paisanas y otro por mujeres. Como mujeres celebramos el “Día Internacional de la Mujer” y como paisanas “Purim”.

Podrán haber miles de mujeres diferentes en el mundo, cientos de paisanas distintas, pero todas tenemos algo en común con Esther Hamalka: somos unas princesas (que se ponga el saco a quien le quede). A continuación los tipos de princesas paisanas que existen según La Meidele:

1. La Princesa Idishe Mame.

Probablemente el tipo de princesa paisana más popular, pues es representada hasta en la TV y miles de películas. Todos conocemos a una princesa como esta, pues todos tenemos al menos una dentro de nuestra familia. Las Idishe Mames se caracterizan por dar de comer a sus hijos, nietos, sobrinos y esposos cantidades dignas para alimentar a un hipódromo completo, por obligarnos a ponernos suéteres cuando está a más de 40 grados afuera y por hacernos sentir mal cada que algo no les parece con un simple: “Haz lo que tu quieras” o “Al fin y al cabo ¿quién se preocupa por mí?”

2. La Princesa Fit.

Al igual que “sporty” de las famosas Spice Girls, existe el tipo de princesa paisana super deportista que lleva un estilo de vida sano; probablemente demasiado sano. Estas princesas se despiertan diario a las 5:00 a.m. para tomar clase de kick boxing, de ahí una hora y media a darle al gym y después un jugo verde para recargar energías para la clase de yoga de las 8:00 a.m. que termina a las 10:00 a.m., justo a tiempo para desayunar un Açaí Bowl (sin azúcar obvs). Acuérdense que hasta ahorita solo son como las 11:00 a.m., todavía queda todo el resto del día para ir a pilates, spinning, body barre y comer alrededor de ½ lata de atún. ¿El uniforme? Leggings de Lululemon, tenis Yeezy, t-shirt de Spiritual Gangster, sudadera de Adidas All Originals y cero grasa plis.

3. La no princesa, sino princesísima.

No por generalizar, pero en esta categoría caen muchas hermanas chicas de familias con puros hermanos, o sea, con-sen-ti-do-tas. Como les dirían en mi familia (o las familias super idish) las “shprintzes”. Una representación tropicalizada de lo que son las JAPs (Jewish American Princess): chavitas bien, que seguramente estudiaron o van a estudiar diseño de modas en la Ibero o en Centro (si se creen muy alternativas), siempre vestidas de pies a cabeza con el último grito de la moda, que no solo tienen el iPhone más nuevo, sino el iPad, iWatch, iYoquesequé, muy pero muy acostumbradas a que la secretaria de su Papi (Ojo, no de su Papá, de su Papi) les resuelva la vida y les acabe las tareas.

4. La princesa que está en todo.

De verdad que este tipo de paisanas son “súperwomans”. Parece que sus días tienen por lo menos 28 horas, pues es imposible pensar cómo les da tiempo de hacer todo lo que hacen. Son maestras de un colegio en la mañana, van a visitar a su amiga que acaba de dar a luz en el hospital, para correr a su casa a hacer la comida para sus hijos y todos sus amigos, les ayudan a hacer un proyecto para la escuela y de ahí volando al depor a que tomen sus clases, mientras aprovechan para ir al gym y saludar a la amiga de la tía de la prima de su marido que trabaja en fomento deportivo. De ahí regresan a la casa a bañar y darles de cenar a los hijos, para ir a dar una junta que prepararon (¿quién sabe cuando?) de La Marcha de la Vida o Yad Vashem, saliendo llevan a todos sus janijim a cenar a “La Muertita” y se van a la casa a saludar, platicar y ponerse al corriente de su serie favorita con su esposo. Al día siguiente: otra vez.