El embajador de Israel ante las Naciones Unidas, Danny Danon, criticó el miércoles a la Comisión Económica y Social de las Naciones Unidas para Asia Occidental (CESPAO) después de que esta publicara un informe acusando a Israel de establecer “un régimen de apartheid que oprime y domina al pueblo palestino”.

Titulado “Prácticas israelíes hacia el pueblo palestino y la cuestión del Apartheid”, el informe dice que “la evidencia disponible establece más allá de una duda razonable que Israel es culpable de políticas y prácticas que constituyen un crimen de apartheid tal como se define legalmente en los instrumentos del derecho internacional”.

La comisión, con sede en Beirut, criticó la Ley de Retorno de Israel “que confiere a los judíos en todo el mundo el derecho de entrar en Israel y obtener la ciudadanía israelí independientemente de sus países de origen si pueden mostrar vínculos con Israel-Palestina, mientras que se niega este derecho a los Palestinos, incluyendo aquellos con residencias ancestrales documentadas en el país”, como una política de “ingeniería demográfica” destinada a mantener el estatus de Israel como Estado Judío.

El informe además acusa a Israel de “prácticas” por medio de las cuales “Israel impone un régimen de apartheid”.

Danny Danon, enviado de Israel a la ONU, criticó el informe, calificándolo de “un intento de difamar y etiquetar falsamente a la única democracia verdadera en Medio Oriente mediante la creación de una falsa analogía, es algo despreciable y constituye una mentira descarada”..

“No es de extrañar que una organización encabezada por un individuo que ha pedido boicots contra Israel y comparado nuestra democracia con los regímenes más terribles del siglo XX, publique ese informe. Hacemos un llamamiento al Secretario General para que desvincule a la ONU de este informe parcial y engañoso”, dijo en referencia a la secretaria ejecutiva de la CESPAO, Rima Khalaf, de nacionalidad jordana.

El informe fue compilado por Richard Falk, un profesor emérito de Princeton con un largo historial de vehementes ataques contra y que anteriormente fue Relator Especial de la ONU para los Derechos Humanos en Palestina, y por Virginia Tilley, una política estadounidense. En conferencia de prensa, Falk dijo que el documento y sus conclusiones “llegan después de 50 años de diplomacia frustrada por no poder encontrar una manera de liberar al pueblo palestino de la opresión y negación de sus derechos”.

Este mismo día, Estados Unidos exigió que el Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, retracte el informe. Guterres se distanció personalmente de él, pero la embajadora de Estados Unidos en la ONU, Nikki Haley, dijo que debe deshecharse por completo.

“Estados Unidos se declara indignado. El secretario de la ONU hizo bien en distanciarse, pero debe ir más allá y retractarlo por completo”, dijo Haley.

Con información de Times of Israel