Enlace Judío México.- La mayoría de los arrestados son miembros de las fuerzas policiales, a quienes Ankara relaciona con Fethullah Güllen, supuesto instigador del golpe del año pasado.

IDAFE MARTÍN

Apenas 10 días después del referéndum constitucional que reforzó los poderes del presidente Recep Tayyip Erdogan, el gobierno turco lanzó hoy otra oleada de detenciones contra supuestos miembros de la cofradía islámica del clérigo Fethullah Güllen, exiliado en Estados Unidos y a quien Ankara acusa de ser el instigador del fallido golpe de Estado del 15 de julio del año pasado.

Güllen, que en el pasado tuvo buenas relaciones con Erdogan, repite que no tuvo nada que ver con el golpe. Turquía exige a Washington su extradición.

El ministro del Interior Suleyman Soylu anunció esta mañana, según varios cables de agencias, que “una operación en 81 provincias, que sigue activa, sirvió para detener a 1,009 personas”. La mayoría de los detenidos son miembros de las fuerzas policiales. Más de 8.500 policías participaron en los arrestos, que se producen sólo tres semanas antes del previsto viaje de Erdogan a Estados Unidos.

La represión tras el fallido golpe de Estado lleva ya más de 46.000 detenidos y ha hecho que más de 120.000 personas hayan sido despedidas de sus empleos: policías, militares, empleados de la Administración pública, jueces, profesores universitarios y hasta clérigos. También sirvió para cerrar decenas de medios de comunicación y para convertir a Turquía en la mayor cárcel de periodistas del planeta.

Según el informe anual de la ONG “Reporteros sin Fronteras”, publicado hoy, en Turquía hay “una caza a los medios críticos” y el país ya se sitúa en el puesto 155 –de un total de 180- en la lista de libertad de prensa de esta organización. El país vive bajo la declaración de estado de emergencia desde el fallido golpe de Estado, lo que refuerza los poderes del gobierno y disminuye las garantías democráticas y la independencia judicial.

La ola represiva, que fue intensa en los últimos meses del 2016, se había parado desde principios de año hasta esta nueva catarata de arrestos de esta mañana. El diario ‘Hürriyet’ contaba hoy que el gobierno tiene todavía “una lista de 7.000 personas a detener”.

El ministro Soylu dijo esta mañana que las detenciones sirven para “limpiar” la Policía de “elementos sospechosos” de pertenecer a la cofradía de Güllen, que Ankara considera una organización terrorista que intenta crear un Estado paralelo para controlar Turquía desde el exterior.

Erdogan ganó por muy escaso margen el referéndum constitucional del pasado 16 de abril que le permitirá reforzar sus poderes presidenciales. La oposición denunció fraude electoral y los observadores internacionales aseguraron que el referéndum no cumplió las condiciones mínimas para ser considerado acorde a los mínimos criterios democráticos.

 

Fuente:clarin.com