Los midrashim son parte de la tradición oral en la tradición judía. Son cuentos, relatos y explicaciones que muestran una interpretación de las escrituras más profunda de lo que se puede apreciar a simple vista. El Sefer Ha – Aggadah es un libro que compila varios de los midrashim más importantes que se encuentran distribuidos en varias fuentes como el Talmud y compilaciones de la literatura rabínica de la Edad Media. A continuación les mostramos un ejemplo de estos cuentos. Habla sobre las pruebas que hay de la existencia divina. Esperamos les guste.

Sefer Ha – Aggadah. El mundo como testimonio de D-os.

“D-os creó” (Gen 1:1).

Sucedió un día que un ateo fue con rabí Akiva y le preguntó “¿Quién creó este mundo?” rabí Akiva respondió: “El Santo, Bendito Sea” y el hereje pidió que se le enseñará alguna “prueba irrefutable” de que así era. A lo cual rabí Akiva le contestó que regresará al día siguiente.

Al día siguiente, como se había dicho, el ateo llegó. Rabí Akiva la preguntó: “¿Qué son estas telas?” – “Ropa” respondió el hereje.
“¿Quién las hizo?”, preguntó rabi Akiva.
“El sastre” respondió el hombre.
“No te creó. Dame una prueba irrefutable” (Akiva).
“¿Qué es lo que puedo enseñarte?, ¿qué no sabes que esta ropa fue hecha por un sastre?” Entonces Akiva preguntó: “y tú ¿qué no sabes que este mundo fue hecho por El Santo Bendito Sea?”

Cuando el hombre se retiró, los discípulos del gran rabí le preguntaron: “Pero maestro, ¿cuál fue la prueba irrefutable?” A lo cual el gran hombre contestó “Mis niños, incluso una casa proclama el nombre de su constructor, un traje el del sastre que lo hizo y una puerta el de su carpintero, de la misma forma el mundo da testimonio del Santo, Bendito Sea, que lo ha creado”

Fuente: Sefer Ha-Aggadah