Un libro explica el drama de los judíos alemanes a través de la más que centenaria fábrica Lehmann, un recinto fabril que comenzó fabricando muñecas de porcelana y que aún hoy conserva en el corazón de Barcelona sus edificios, ocupados ahora por talleres de creación.

JOSÉ OLIVA

La principal autora de “La fábrica Lehmann” (Comanegra) es Dory Sontheimer, autora de “Las siete cajas” y “La octava caja”, dos libros sobre la historia de su familia, víctima del holocausto nazi, quien quería contar la historia de esta fábrica de muñecas de porcelana que habían fundado dos de sus antepasados en Nuremberg a finales del siglo XIX.

La combinación de intereses entre Sontheimer y dos de los ocupantes actuales de Lehmann, la editorial Comanegra y la agencia de comunicación Ideograma, precipitó la publicación, comentó en una entrevista a Efe la autora barcelonesa de origen alemán.

El inicio de la fábrica está vinculado a la familia de Sontheimer y, de hecho, señala, “Lehmann nació de una historia de amor y desapareció debido a la infamia del nazismo”, comenta Dory Sontheimer.

El fundador de la fábrica era Max Lehmann, cuñado de su abuelo Max Sontheimer: “Todo comenzó en el verano de 1893 cuando se casaron en Nuremberg Max Lehman, de 28 años, y Ella Sontheimer, de 20, que pertenecía a la alta sociedad local.

Los dos novios pasaron el viaje de bodas en Barcelona, entonces “ciudad de moda en toda Europa, cinco años después de la Exposición Universal de 1888”.

En 1885, los hermanos Max y Jacob Lehmann habían fundado una empresa en Nuremberg dedicada a la fabricación y exportación de artículos de quincallería que, con el tiempo, se convirtió en una importante fábrica de muñecas.

“En su viaje nupcial Max y Ella se enamoraron de la ciudad hasta el punto que decidieron instalarse en Barcelona y abrieron una sucursal al comprobar que fabricar muñecas aquí era más barato que en Alemania y la situación portuaria favorecía la exportación a ultramar”, narra la autora.

El cuñado del fundador y abuelo de la autora, Max Sontheimer entró a trabajar en la factoría de Nuremberg con vistas a hacerse cargo de la fábrica de Barcelona.

La estratégica alianza comercial con la firma parisina Eden-Bébé orientó la producción de Lehmann hacia la fabricación de muñecas de porcelana.

Fue así como en 1903 construyeron una chimenea de 25 metros de altura e instalaron un horno para la cocción de porcelanas y fogones para fundir metales, mientras que en el primer piso estaban las cadenas de montaje, explica desde el patio del recinto la autora.

La sucursal en Barcelona, precisa, tuvo “una importante expansión porque la ciudad se convirtió en el punto de donde salían las exportaciones que iban a Argentina, Cuba y las colonias africanas españolas Fernando Poo, Guinea y Tetuán, mientras que los pedidos de Europa del Este salían de Nuremberg”.

En la sede de Barcelona, que llegó a tener unos 300 empleados, también trabajó desde 1929-1930 el padre de Doris, Kurt Sontheimer, quien había nacido en 1907, hijo del matrimonio formado por Max Sontheimer y Rosa Winternitz, perteneciente a una familia checa de industriales del textil.

Kurt Sontheimer llegó a Barcelona huyendo de las persecuciones de los nazis a los judíos, apunta, y aquí conoció a la que acabaría siendo su esposa, Rosl Heilbruner, otra huida del nazismo por su condición judía, que acabarían adquiriendo la nacionalidad española, recuerda Dory Sontheimer.

En febrero de 1937, como tantas otras fábricas de Barcelona, la Lehmann fue colectivizada por el gobierno republicano y comenzó a producir cubertería para el ejército.

Sontheimer conoció la parte familiar de la fábrica relativamente hace poco, pero “con todos los documentos encontrados se pudo documentar la actividad de la fábrica sólo hasta 1939, en que la fábrica que había pertenecido a la familia pasó a manos de las tropas franquistas”.

De hecho, los trabajos de la historiadoras Mercè Tatjer y Susana Sánchez, incluidos en el libro, han permitido a Sontheimer conocer la actividad de la fábrica posterior a la Guerra Civil española, cuando Lehmann y Cía es sustituida por Lemanos, S.A., dedicada a la fabricación de disfraces, que en 2002 trasladaron la producción a la vecina Sant Adrià de Besós, donde permanece actualmente.

En la actualidad, Dory Sontheimer está trabajando con el director Carles Canet y la productora Broadcaster en un documental basado en el libro “Las siete cajas”, que ha sido adquirido por TV3 y TVE y que se emitirá a finales de este año o principios de 2018.

 

 

Fuente:cciu.org.uy