La conexión entre el amor y la comida en el judaísmo es milenaria existe desde tiempos de la Torá. Desde que Rubén le entrega la flor del amor a Rajel o desde que Salomón escribe el Cantar de los Cantares incluyendo en su poema a las granadas, los higos, la miel y la manzana. Desde entonces y hasta la fecha el amor de la pareja se vive todos los viernes por la noche, donde la cena de Shabat se convierte en un medio de intimidad y unión para la pareja, un preludio a la relación íntima. Desde entonces la comida bíblica ha funcionado como afrodisiaco para las miles de parejas que celebran su amor en una forma judía. Hoy también este contexto toma importancia, ya que hoy se celebra Tu B’Av, el día en el que el judaísmo y las parejas celebran el amor. Por ello, Merissa Nathan Gerson, escribe para nosotros sobre los numerosos afrodisiacos que existen en la cultura judía y su contexto bíblico. Esperamos les guste.

Afrodisiacos milenarios judíos que pueden hacer interesante cualquier cena

¿Qué es un afrodisiaco?

“Comer puede ser un acto muy sensual”, explica la autora judía de libros Leah Koenig, “tiene sentido que los pasajes bíblicos con carga erótica usaran a los frutos de la naturaleza (manzanas, vino, miel, aceite, especias) como una forma de trasmitir la sensualidad”.

La combinación de un sabor determinado, la textura, el aroma y la vieja y simple química pueden convertir un determinado alimento en un afrodisíaco. Éstos son: “cualquier alimento que mejora el romance y/o la vida sexual”. Algunos elevan la temperatura corporal, otros proporcionan energía. Sin embargo, es más complejo de lo que parece: los alimentos que afirman la vida, que promueven la virilidad, la libido, y alta energía son potenciadores del amor. Mientras que los alimentos que reducen la inhibición aumentan la circulación y crean calor en el cuerpo.

Hay muchos alimentos bíblicos que se consideran afrodisiacos y que todavía existen en nuestras cocinas de hoy, como podrían ser: queso, mostaza, manzanas, higos, nueces, uvas, salmón, vino tinto, aceite de oliva, miel, granadas, huevos, avena y leche.

¿Cuáles son afrodisiacos que usaban nuestros sabios?

De entre todas las comidas judías en la que más se propicia el erotismo es en la cena de Shabat. No en balde, el menú de Shabat de los sabios incluía el ajo, que comparte una composición química similar a las secreciones sexuales femeninas; la remolacha, que tiene un alto contenido de boro, el cual estimula la producción de hormonas sexuales; y el pescado, que está lleno de vitaminas para mejorar la libido.

Otros ingredientes de antiguos menús bíblicos incluyen la canela, que produce calor y aumenta el apetito, y la menta – que proporciona las vitaminas A, C y B2 y calma la mente y el cuerpo con nutrientes como el selenio, magnesio, ácidos grasos omega 3, zinc y fibra dietética. Las almendras que contienen altos niveles de ácidos grasos, los cuales son clave para la producción de hormonas necesarias para mantener un impulso sexual saludable en mujeres entre ellas un aminoácido llamado arginina, la cual también ayuda a relajar los vasos sanguíneos y ayudan a la circulación para aumentar la potencia sexual en los hombres.

También podemos apreciar la importancia del huevo en la alimentación de las fiestas. Casualmente éste contienen altos niveles de vitaminas B6 y B5 (que ayudan a equilibrar los niveles de hormonas) y B12 (que es clave para la producción de testosterona sana).

Tenemos la granada, un refuerzo antioxidante de energía sexual, así como la dulzura sensual de los higos y la miel. En otras palabras, aún tenemos muchos de estos afrodisíacos bíblicos para hacer una cena seductora de Shabat o Tu B’Av típica desde Kugel hasta pastel de manzana, pollo asado con higos, dátiles y nueces, y más.

Sin embargo no hay que olvidar que no es sólo el contenido, la textura o la forma de un alimento lo que hace que sea afrodisíaco; es el estado de ánimo que crea, la comodidad, la disminución de la inhibición. Como dice la Dr. Ruth Westheimer “la excitación no es igual para todos: para algunos es la sopa de pollo, para otros puede ser la pechuga – depende de la persona. Tal vez para otro el puré de manzana.” Uno debe usar cualquier cosa que ayude a la pareja a sentirse relajados y alegrados, ya que no es sólo el contenido, la textura o la forma de un alimento lo que hace que sea afrodisíaco; es el estado de ánimo que crea, la comodidad, la disminución de la inhibición.