Enlace Judío. A pesar de que mi país – Pakistán – no tiene ninguna relación diplomática con Israel, y a pesar del omnipresente antisemitismo en Pakistán, he reunido suficiente coraje para expresar mi amor por el hebreo – y el pueblo judío.

SARMAD IQBAL

Siempre he sentido mucha curiosidad para explorar el judaísmo. Los judíos siempre son vistos como los “malos” en mi país, aunque – irónicamente – Pakistán no tiene una población judía. Pero esta inexistente comunidad judía, y los inexistentes lazos diplomáticos entre nuestros países, son lo que culminó mi curiosidad sobre Israel y el pueblo judío.

Lamentablemente, ni siquiera puedo viajar a Israel, ya que está escrito claramente en mi pasaporte paquistaní que, “Este pasaporte es válido para todos los países del mundo, excepto para Israel“. En su lugar, decidí explorar Israel a través de los medios culturales de la música, el cine y los programas de televisión.

Siempre he sido vehementemente contrario a todo el antisemitismo practicado y predicado por muchos en Pakistán. Pero este odio me llevó a explorar lo que realmente es Israel, y lo que realmente son los judíos. Así que películas israelíes como The House en Chelouche Street, y programas de televisión como el Factor X de Israel, se convirtieron en mis medios para explorar un Israel que es diferente de todos los estereotipos negativos que vemos en Pakistán. Las películas, canciones y programas de televisión israelíes aumentaron mi interés por explorar Israel y el judaísmo, a través del estudio del hebreo.

Un día, mientras buscaba una canción de Beyoncé en YouTube, me encontré con “Ahavá Ktaná” de la cantante israelí Shiri Maimon; esa canción era incluso mejor que la canción de Beyoncé que había estado buscando.

Shiri tenía una voz hipnotizante que me relajaba, aunque la canción no estuviera en un lenguaje que yo pudiera entender. Pero la canción me llevó a estudiar, y enamorarme del hebreo. Comencé a estudiar intensamente el idioma, y me pareció inmensamente cautivador. También comencé a descubrir con entusiasmo los antecedentes históricos del hebreo, y me sorprendí cuando descubrí que el griego y el romano también habían influido en el lenguaje, pero que a pesar de estas presiones, el hebreo ha permanecido como un lenguaje distinto durante siglos.

Aprender y estudiar este gran idioma también me ayudó en el estudio de los libros sagrados judíos, como el Talmud y la Torá. Después de estudiar el judaísmo, pude averiguar por qué los judíos y los musulmanes tienen tanto en común, desde Shalom y Salaam hasta la circuncisión masculina, hasta el Corán que etiqueta a los judíos como “pueblo del libro”. Aunque tristemente muchos musulmanes hoy no ven los lazos entre las dos religiones por lo que realmente son.

Encontré el hebreo más fascinante cuando descubrí que el idioma comparte muchas palabras con el árabe, y el árabe, a su vez, tiene muchas palabras en común con el urdu, que es el idioma nacional de Pakistán.

El hebreo tiene palabras como “Brajá” para bendición, y los árabes tienen casi la misma (Baraka). En urdu, los paquistaníes tienen “Barkat” – que muestra cómo (los parlantes de urdu y hebreo) estamos conectados a través de nuestras respectivas lenguas, a pesar de que el vínculo entre hebreo y urdu es lejano y tiene al árabe en el medio.

Otras palabras comunes entre el hebreo y el urdu incluyen la palabra para padre – ambos usan “Aba“. Los paquistaníes tienen la palabra “Ilahi” para Divino, que es similar al hebreo “Elohi“. También tenemos en común la palabra muerte, ya que ambos la llaman “Mot“. Los hablantes de hebreo tienen “Kol” para “todo”, y los paquistaníes tienen “Kul” en urdu. Hay tantas palabras comunes entre nuestros idiomas – pero escribiré sobre ellas pronto.

Hasta entonces, Shalom para todos.

Sarmad Iqbal es un escritor, blogger y estudiante paquistaní con inclinación por leer, escribir, aprender idiomas y estudiar culturas, religiones y asuntos geopolíticos.

Fuente: The Times of Israel  – Traducción: Silvia Schnessel – Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudíoMéxico