Enlace Judío México – Este fin de semana se llevó a cabo un gran evento para celebrar los primeros 75 años de la Sinagoga Adat Israel, mejor conocida como el Shul de Álamos. Este querido lugar de la Comunidad es un hermoso recinto con una gran historia.

El salón de fiestas estaba lleno. La mayoría de los asistentes eran personas que en su niñez asistieron al shul (sinagoga en idish) de álamos. El ambiente era cálido y de recuerdos que se platicaban entre los presentes. Se sirvió una rica comida con Cholent (platillo típico askenazi) y los pasteles y galletas que hasta el día de hoy se pueden comprar en el shul.

Después de la comida se le entregó un regalo a la Sra. Gererda que es la encargada de la cocina y quien preparó la comida. Luego de la comida tomó la palabra el Sr. Manuel Taifeld, Presidente de Adat Israel:

“Hoy celebramos el 75° aniversario del Shul de Álamos, considerado como una verdadera Joya histórica de nuestra Comunidad, además es el templo más cercano a Yerushalaim, debido a que es el que está más cerca del Aeropuerto. En el aspecto de los servicios religiosos nunca ha faltado el Minián durante el Kabalat Shabat y los servicios del sábado en la mañana, y ni se hable de las Fiestas Mayores, en todos los casos la mayoría viene de rumbos alejados de esta colonia.

Y desde luego el Templo se distingue por preservar no solo el sabor de antaño de su cholent, el leikaj y las galletas, que Uds. acaban de disfrutar, además conserva la esencia de lo que era algún Shul de donde llegaron nuestros ancestros de Europa. Aquí cabe mencionar que los rezos están a cargo de un grupo de jóvenes entusiasta conformado por Víctor Moreno, Israel Aguirre, Yarón Kaminer, los nietos de Toño Sánchez y eventualmente asisten Saúl Borovsky y Lalo Ochoa y desde luego nuestro Jazán y Vicepresidente del Shul, Elliott Goldsmith. Actualmente “Adat Israel” es Templo más antiguo del sector ashkenazí que sigue en funciones, ya que el primero fue la hermosa Sinagoga Histórica de Justo Sierra 71, recién remodelado, que fue inaugurada un año antes, hoy funciona básicamente como un extraordinario Centro Cultural y Social.

Hablar de la historia de “Adat Israel”, es hablar de la llegada de los primeros inmigrantes judíos de Europa a México, que sin idioma y sin recursos, habitaban en las viejas vecindades del Centro de la Ciudad.

Con el tiempo, gracias al arduo trabajo y sacrificios, lograron que su situación económica empezara a mejorar, entonces se fueron mudando a mejores rumbos de la Ciudad. Así, a fines de la década de las años 30’s y principios de los 40’s, la Colonia Álamos se pobló de un número importante de paisanos, al grado que se le considerada como un verdadero “shtetl”, donde los sábados se reunía un Minían en el garaje del Sr. Isidoro Steinberg, en la calle de Coruña 168, y él mismo dirigía los rezos. Sin embargo para las Fiestas Mayores, se requería un lugar más grande, entonces el Sr. Leib Fiiller facilitaba su panadería para que ahí reunieran. ¿Se imagínan un Yom Kipur, oliendo a pan?

En 1942, se crea la Directiva, cuyo objetivo era tener un lugar propio para rezar, entonces, bajo la Presidencia Sr. Carlos Kracer, adquieren este predio y fundan el Templo con el nombre de “Adat Israel”.

En un principio el Templo ocupaba lo que es el salón de fiestas, fue hasta 1948, que durante la Presidencia del Sr. Yehuda Leib Brener, se inició formalmente la construcción del templo en el terreno que se encontraba en este lugar.

La obra estuvo a cargo del Ing. Arq. Gregorio Beitman, que tristemente falleció poco después de haber concluido la construcción en 1953. Indudablemente en las placas del Memorial Z”L, en cada plaquita de las que hay en los asientos, en cada rincón del Templo tiene su propia historia, desde quiénes donaron los fondos para la construcción, hasta los tabiques, el material para la construcción, la madera para las bancas, la Habimá, el Aron Hakodesh, las cortinas, los Sifrei Toroth, las Coronas de Plata, el barandal, el hermoso candil, y lo más reciente, que son los preciosos vitrales diseñados por el gran artista Enrique Shor. En fin estas paredes permanecen como testigos mudos de un sinfín de historias. Con el paso de los años, tal como sucedió en otras colonias, las nuevas generaciones que empezaban a formar sus propios hogares se fueron mudando a otros rumbos de la ciudad donde se fueron concentrando la mayor parte de los miembros de la Comunidad, lo que provocó que el Shul tuviera cada vez menos asistencia. En la década de los años 70’s, el Templo que casi había caído en el olvido, el Sr. Don Jaime Perezman que estaba a al frente del Templo, poco antes de morir, motivó al joven matrimonio formado por Abraham y Sarita Nurko para que tomaran la estafeta, quienes con la colaboración de un grupo de amigos, y la ayuda económica de los Sres. Pablo e Israel Brener, se dieron a la tarea de rescatar y remodelar el templo, que estaba en vías de cerrarse.

Quiero agregar que una característica del Templo fue que nunca tuvo un Rabino, yo creo que por eso todavía existe, pero lo que sí tuvo y durante muchos años fue al Jazán Don Víctor Itzcovich Z’L, que falleció prácticamente en el Shul.

De la directiva que estaba conformada por 17 miembros, actualmente quedamos solo el Sr. Toño Sánchez, que es el decano del Shul, con más de 50 años de una entrega incondicional, y un servidor con Sarita mi esposa. Es más nosotros que ni siquiera éramos de Álamos, fuimos los últimos en integrarnos a la Directiva Shul, eso fue hace más de 30 años, a raíz de haber hecho la Bar Mitzva de mi hijo Yoel, aquí.

Hoy día Álamos dejó de ser un shtetl, ya que son muy contados los paisanos que viven en esta zona, pero quienes aquí vivían, siguen teniendo el orgullo, la nostalgia y los recuerdos imborrables de lo que fue toda una época en la historia de nuestra Comunidad.

A este Templo se le conoce como el Shul de los Milagros — ya que existe de Milagro, nuestros ingresos proviene de gente que con poco o mucho tienen la conciencia de apoyarnos para el Shul siga adelante, nos complementamos con la venta de Liekaj, Galletas y de los banquetes eventuales que tenemos de Bar y Bat Mitzvot, Bodas, Brit Milot, Aniversarios, Convivios, etc.

En el aspecto de los servicios religioso nunca ha faltado el Minián durante el Kabalat Shabat y los servicios del sábado en la mañana, y ni se hable de las Fiestas Mayores, en todos los casos la mayoría viene de rumbos alejados de esta Colonia.

Y desde luego el Templo se distingue por preservar no solo el sabor de antaño de su cholnt, el leikaj y las galletas, que Uds. acaban de disfrutar, además conserva la esencia de lo que era algún Shul de donde llegaron nuestros ancestros de Europa.

Aquí Cabe mencionar que los rezos están a cargo de un grupo de jóvenes entusiasta conformado por Victor Moreno, Israel Aguirre, Yarón Kaminer, los nietos de Toño Sánchez y eventualmente asisten Saúl Borovsky y Lalo Ochoa y desde luego nuestro Jazán y Vicepresidente del Shul, Elliott Goldsmith.

Y justamente de esos aires ancestrales, vamos a presentar desde Moscú el Extraordinario Espectáculo Musical “Canciones del Shtetl” con el insuperable Showan Efim Alexandrov, espero que lo disfruten.

La Sra. Sarita Nurko , quién trabajara durante muchos años junto con su esposo en la directiva y mantenimiento del shul dirigió unas palabras.

“Cuando decidimos remodelar el shul los encontramos muy deteriorado por el paso de años en que nadie venía. Primero cambiamos el color que era azul fuerte y lo pintamos de blanco. De ahí siguieron muchos trabajos y muchas satisfacciones al ver que la gente venía de nuevo a este “nuestro shul” Tenemos muchas anécdotas que contar. Una de ellas fue que para un Bat mitzvá a la hora de estar preparando el guefilte fish (pescado típico ashkenazi) que se revuelve con las manos, cuando ya habíamos terminado y se estaba cociendo, una de las señoras dijo “no tengo mi anillo” seguro se fue en el pescado y nunca apareció”.

Al terminar su plática Taifeld tomó la palabra Elliott Goldsmith:

“En los últimos años el shul de Álamos se ha convertido en un templo que ha sido una inspiración a mucha gente. Algunos que nos habíamos alejado de nuestras tradiciones. Ahora gracias al calor con que nos reciben en el shul. Que por su condición han decidido unirse al pueblo de Israel y se acompañan con la gente uniéndose a los rezos. Si ya podrían ir a templos más cercanos a sus hogares continúan viniendo a este shul por sentimiento, a nuestro shul, un shul vivo. Muy pocas veces no hemos conseguido tener un minian, todo esto gracias a los Señores Sarita y Manuel Taifeld. Siempre al tanto de las necesidades del shul”

Terminando sus palabras le ofrecieron a los señores Taifeld un obsequio.