Enlace Judío México.- Los secretos mejor guardados de esta bella ciudad del norte de Israel son deliciosos e intrigantes, con pinceladas de arte y entretenimiento.

JESSICA HALFIN

Cuando la mayoría de la gente piensa en una visita a Haifa, lo primero que les viene a la mente son los exuberantes Jardines Bahá’í, obra maestra de paisajismo que corona la montañosa ciudad como joya de colores. Muchos conocen el teleférico, el paseo marítimo o sus numerosos museos, como el de Ciencia, Tecnología y Espacio.

Pero muy pocos conocen las siguientes 10 joyas que esconde la tercera ciudad más grande de Israel. Y es una lástima, porque estamos seguros de que tienen que ser parada obligada en su próxima visita al norte.

Heladería Eissalon

Profesionalmente formados en el arte del gelato por los italianos que inventaron el producto, la pastelera Adva Barak Liani y su esposo, Sion, abrieron Eisselon en el lugar menos esperado: la cuarta planta de un pequeño centro comercial en el elegante barrio residencial de Denia.

Su tarea es elaborar pequeños lotes de súper deliciosos sabores hechos a mano, como labane (una especie de queso de yogur muy popular en el Medio Oriente) y zaatar (una mezcla de especias), cerveza, tahini y castañas. Cada uno de los sabores está cubierto con crema batida, y todo por un precio razonable.

Bodega Vortman

Esta bodega está situada detrás de la called principal, en un apacible barrio residencial, en la parte alta de la ciudad.

El enólogo Hai Vortman transformó en negocio su pasión para hacer vino y convirtió parte de la propiedad de su familia en el Monte Carmel en una moderna sala de catas con una vista espectacular sobre el Mediterráneo.

Allí, el visitante puede disfrutar de una degustación privada con Vortman con vinos que son ahora reconocidos internacionalmente, maridados con excelentes quesos de cabra de Ein Kamonim, en Galilea.

 

Restaurante Eataliano Dalla Costa

El establecimineto, con relajantes vistas al mar y situado en la hermosa playa de Bat Galim, se ha convertido en todo un clásico en muy poco tiempo por su comida italiana de alta calidad.

Para llegar a él, uno debe llegar hasta el barrio que está frente a la playa, venido a menos en el pasado, o caminar por el paseo principal de la playa hasta llegar al final.

A pesar de todo, haga el viaje y no se desilusionará.

Skate Park

Nacido de un movimiento social iniciado por los jóvenes de la ciudad, el parque fue meticulosamente planeado por un profesional del patinaje, Avi Luzia, y construido por el patinador Tommy Boyarchik, de Haifa, en colaboración con sus colegas estadounidenses Mark Scott y Cody Lockwood, que viajaron desde Portland, Ore., para supervisar el proyecto.

Situado en el extremo norte del paseo más alto, que atraviesa el parque Hecht, el lugar está lleno siempre de patinadores experimentados y principiantes. La iluminación nocturna es óptima.

Spa Pnina BaCarmel

A pocos minutos a pie del concurrido Carmel Center, en una tranquila calle residencial conocida como el “paseo de los amantes”, se encuentra una pequeña construcción de la época de los Templarios alemanes, siglo diecinueve, que se ha convertido en un relajante spa y complejo turístico.

Pnina BaCarmel es un verdadero refugio para almas cansadas que necesitan cuidados y cuenta con un jardín que sólo puede describirse como “mágico”.

Estudio y galería de arte HaNamala (La Hormiga)

El estudio, que no tiene un aviso que lo identifique, se encuentra en el edificio verde de la calle Port, en el centro de la ciudad, y muestra las obras del artista Shahar Sivan, y mucho más.

Sivan es uno de los padres de la escena artística alternativa de la ciudad y regularmente abre la galería para que estudiantes y amantes del arte participen en tertulias nocturnas. También es centro de estudio y se dan clases de arte, enseñadas por el propio Sivan, a las que cualquiera puede asistir y practicar cómo esbozar modelos desnudas.

Restaurante Katy’s Pots (HaSirim Shel Katy)

Escondido cerca al mercado de las pulgas está Katy’s Pots. Aquí, los clientes de siempre charlan animadamente con la encantadora propietaria, anfitriona y cocinera mientras disfrutan de una comida casera que les hace recordar su infancia. Varias tradiciones judías están representadas en los platos, especialmente en los de Europa del Este, que muchos israelíes olvidaron hace tiempo.

Museo del Ferrocarril de Israel

Si le gustan los trenes, o si lo que busca es un lugar para sacar a los niños del aburrimiento, este museo, escondido en la parte baja de la ciudad, podría ser una excelente idea. Hace énfasis en el legado del histórico ferrocarril Hedjazi y el sistema otomano de trenes que cruzaron Israel hasta la era moderna. El museo ha adoptado un enfoque interactivo, así que permite ver, sentir y vivir la experiencia de los vagones.

Tel Shikmona y el paseo marítimo

La playa de Haifa es una joya escondida en sí misma debido al trazado de la ciudad. Hay que proponerse buscarla porque de lo contrario puede que sólo la vea al entrar o salir de ella.

El paseo, que está pavimentado y de aproximadamente 5 km de largo, es un paraíso para los residentes y no sólo para los que quieren asolearse sino también para familias y parejas, especialmente, donde van para caminatas diarias, correr, practicar surf o disfrutar de un batido de frutas.

El verdadero regalo es para los que logran llegar hasta la parte más alejada de la sección llamada Shikmona, donde verán la playa, rocosa y virgen, en la que la marea forma piscinas naturales, además de extraordinarias aves e impresionantes puestas de sol.

Mivshelet HaBira en el Mercado Talpiyot

Si está buscando un auténtico mercado al aire libre en Israel, entonces el de Talpiyot es el lugar perfecto. Además de las frutas y verduras frescas de temporada, va a notar que hay nuevos puestos de comida.

Junto al mercado principal en la calle Sirkin se pueden encontrar algunos ejemplos de esta floreciente escena culinaria, entre ellos Mivshelet HaBira

 

 

 

 

Fuente:es.israel21c.org