Por Tounsi Karim

Por Tounsi Karim

En el marco de uno de los mayores contratos de armas de todos los tiempos, cuatro países del Golfo y de la Península están planeando adquirir armas por 123 mil millones de dólares (alrededor de € 88,000.000.000). El principal proveedor de estos materiales es, por supuesto, los Estados Unidos.

La lista de compras:

a) Arabia Saudita debe asegurar una cuota de 67 millones de dólares, invertidos en 85 aviones de combate F-15, así como en la modernización de 70 aviones que ya están en su posesión.

b) Según un informe del grupo de expertos de Frost & Sullivan, Riad adquirirá 70 helicópteros de combate Apache, 36 Little Bird y 72 Black Hawk, así como sistemas de defensa contra misiles y buques de guerra.

c) En cuanto a los Emiratos Árabes Unidos, el acuerdo de compra de armas ascendería a casi $ 40 mil millones, recibiendo este país luz verde para la adquisición de misiles antimisiles THAAD y sistemas de defensa Patriot.

d) El Sultanato de Omán, a su vez, recibirá 18 cazabombarderos F-16 de última generación y la actualización otros doce, contra $ 12 mil millones en billetes verdes; Kuwait dará siete millones de dólares para reemplazar y modernizar su la aviación militar.

          Estas enormes transacciones de armas reflejan el temor de las cuatro monarquías aliadas de los EE.UU., de sufrir represalias en caso de un ataque israelí o estadounidense contra las instalaciones nucleares de Irán.

          El creciente peligro que representa un Irán chiíta para sus vecinos sunitas no tiene sólo desventajas para los Estados Unidos:

          Las actividades nucleares de la teocracia iraní fomentan el desarrollo de la industria de armas de EE.UU., deprimida después de la Guerra Fría.

          El acuerdo, tomado en su totalidad, permitirá reducir la tasa de desempleo en los EEUU, favoreciendo así a la Administración Obama. Como ejemplo, Boeing, el fabricante de aviones que produce el F-15 y varios modelos de helicópteros, incluidos en dicha lista de compras, creará 77 mil nuevos empleos gracias a este contrato.

          Según el Financial Times, existe otro objetivo: si los aliados de Washington en el Golfo compran sus armas a los EE.UU.,”se formarán plataformas comunes, potencializando la capacidad de luchar contra un enemigo común “. En caso de necesidad, el Pentágono podrá contar con todos sus aliados, armados y disponibles,

                 

                ¿E Israel?

                Mientras que, hasta entonces, Israel veía con extrema suspicacia cualquier suministro de armas de EE.UU. a los países árabes, no se ha opuesto esta vez a la mega venta.

                ¿Por qué?

                Es probable que la razón haya sido los aviones caza Stealth que adquirió a su vez, en $15.5 mil millones, lo que ayudó a inclinar la balanza.
                El F-35 representa la última generación de aviones de combate de EE.UU., y ni siquiera se encuentra en servicio en las fuerzas armadas de los EE.UU.; lo que permitirá a las Fuerzas Aéreas Israelíes, con toda justicia, de mantener su superioridad militar en la región.

                Además, según Abdel Bari Atouan, el editor del diario árabe de Londres Alquds Alarabi (Jerusalem árabe), para tranquilizar a Netanyahu, Obama prometió no equipar a los F-15 de radares superiores a los israelíes.

                Sin embargo, esta configuración asegura la superioridad aérea árabe en caso de enfrentamiento con los persas.

                En este ambiente de preparación para el conflicto, los Emiratos Árabes Unidos acaban de establecer una base naval en Al-Fujairah en el Golfo de Omán. Ésta es parte de las medidas para garantizar el tránsito de petróleo si Teherán cierra el estratégico Estrecho de Ormuz.

                (De hecho, Irán ha advertido, en repetidas ocasiones, que podría cerrar el Estrecho si se realiza una operación contra sus instalaciones nucleares).

                La construcción de la base de Al-Fujairah es parte de un plan de defensa estratégica de los Emiratos Árabes Unidos, cuyo objeto es proteger a los buques en el Estrecho de Ormuz, a través del cual transita más del 60% del consumo mundial de petróleo, según indica su agencia oficial .

                Los egipcios y los saudíes también han anunciado el fin de sus maniobras militares conjuntas, que se llevaron a cabo “con éxito” en la ciudad de Alejandría.

                Estas maniobras, según los participantes, tienen como objetivo hacer frente a una posible invasión militar de un país vecino.

                © Tounsi Karim para Metula News Agency

                Traducción: May Samra

                Fuente: https://www.menapress.org/