POR REFORMA

El gobierno de Estados Unidos pidió a su embajada en México  buscar evidencias de las intenciones de Irán por ampliar su influencia en la sociedad mexicana, según un cable diplomático emitido el 23 de enero del 2009.

El cable viene contenido en el paquete de informaciones reveladas por WikiLeaks y que han provocado un escándalo diplomático internacional. En el cuarto día de revelación de informes diplomáticos, aparecieron por lo menos dos cables que hacen referencia a México.

En el cable, enviado desde  Washington el 23 de enero de 2009 a varias representaciones de EU en América Latina, entre ellas la Embajada en México, se pide a las representaciones que busquen evidencias de que Irán intenta ampliar su presencia política y económica en la región. Estas acciones de Irán tendrían todo el apoyo de Venezuela, dice el documento.

En el cable se incluye una larga lista de preguntas a los diplomáticos, entre las que destaca si hay indicios de que Irán está tratando de utilizar la región latinoamericana como trampolín para lanzar ataques terroristas contra EU.
En otro despacho, generado en la embajada de Estados Unidos en Caracas, se menciona la elección mexicana del 2006.

Según la comunicación, Estados Unidos observó la posibilidad de un aislamiento del gobierno de Hugo Chávez en el continente americano a partir de los resultados electorales presidenciales en México. Conforme el cable diplomático generado, el 6 de agosto de ese año, donde se analizaba la situación del gobierno de Chávez, la diplomacia estadounidense era cauta respecto a los polémicos comicios del 2006.

”Chávez ha perdido fuerza con los resultados electorales de Perú y (al parecer) en México”, dice el cable, conocido públicamente a partir de las revelaciones de WikiLeaks ,que ha subido a la red más de 250 mil reportes diplomáticos del gobierno de Washington.

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Si Cuba da un vuelco a la democracia”, sigue el comunicado diplomático, “Chávez incrementaría su aislamiento y afectaría su influencia de izquierda radical en el hemisferio”.Chávez debe creer que la sobrevivencia de su régimen queda atada a lo que pase con el régimen cubano de Fidel Castro, según dice el despacho. El cable es extenso y relaciona la crisis de Cuba con el debilitamiento de Chávez. Especula sobre la eventualidad del fallecimiento de Fidel Castro o por lo menos el deterioro serio de su salud y como ello supondría problemas para el gobierno venezolano.

El cable tiene como destinatarios tanto el Departamento de Estado y varias embajadas estadounidenses en América Latina entre ellas la de México, entonces encabezada por Tony Garza.
La ausencia de Castro de escena privará a Chávez de una presencia paternal y a un gestionador capaz de resolver crisis, lo que aumentaría la vulnerabilidad del venezolano, dice el cable.
En el caso de la salida de escena de Castro, Chávez podría ser más impredecible ya que creería que su régimen quedaría ligado al sucesor en La Habana, y bajo algunas circunstancias incluso, podría existir la voluntad de desplegar efectivos militares venezolanos en apoyo del régimen sucesor.

La Embajada considera que ése sería un momento idóneo de advertir a la República Bolivariana de Venezuela de no intervenir en la isla durante su transición.