ILAN ARDITTI

La leyenda del rock Bob Dylan presentó el lunes un concierto muy esperado en Israel en el que interpretó muchos de sus éxitos, pero desilusionó a sus seguidores pues no habló con ellos y se negó a tocar canciones extra.

Se trató del tercer concierto de Dylan en Israel, quien se presentó también en 1987 y 1993. Dylan, quien es judío, tiene una gran cantidad de seguidores en Israel.

Entre las canciones que interpretó destacaron: “Like a Rolling Stone”, “Tangled Up in Blue”, y “All Along the Watchtower”.

Dylan nacido con el nombre de Robert Allen Zimmerman (en hebreo Shabtai Zisel ben Avraham) actuó en el estadio de Ramat Gan, a las afueras de Tel Aviv.

Para algunos como Daniel Levy, de 20 años, la música de Dylan fue “más real, más auténtica y más poderosa que lo que hay ahora”.

Para otros como Yosef Speizer, de 28 años, la falta de contacto de Dylan fue muy extraña. “Todo fue raro”, dijo.

Es bien conocida la influencia del compositor y cantante estadunidense, tanto en la música como en la juventud y los movimientos contestatarios de los años 60. Pero sorprende descubrir que su influjo se extiende a los tribunales, donde es frecuente que jueces y abogados citen versos de sus poemas en sus sentencias y argumentos.