Como muchos saben, la carne Kosher es aquella producida bajo las reglas mencionadas en el Antiguo Testamento y ratificadas por los rabinos a lo largo de los siglos. Una de estas reglas menciona que, para poder ser comestible, el animal debe ser sacrificado por un matarife (Shojet) entrenado, quien verifica que esté libre de enfermedades. Además, el matarife lo sacrifica de manera que el animal no sufra.

En México, para proveer a la Comunidad judía de carne Kosher, los matarifes, a veces, tiene que ir a lugares lejanos para cumplir con su tarea. A mediados del mes de julio, un grupo de estos “hombres santos” se dirigió a un rastro en Tamaulipas, en una avioneta alquilada.

Al ver la avioneta mencionada, entendieron que las cosas iban a ser difíciles: estaba en malas condiciones, el piloto sacaba del motor agua con una jeringa, tardó en arrancar, el aire dentro era escaso…Más adelante, se dieron cuenta que el piloto había perdido el rumbo. De pronto, los motores dejaron de funcionar…

Escucha cómo se salvaron ocho hombres de la Comunidad judía mexicana de una muerte segura en nuestro video “Milagro en nuestros días”, en exclusiva para Enlace Judío.