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El hijo del director Oliver Stone, Sean, se ha convertido al islam. La semana pasada, el joven de 27 años declaró que mientras rodaba un documental en Irán tomó la decisión. La repercusión no se ha hecho esperar en Estados Unidos y el mismo Sean ha declarado que ha empezado a experimentar el rechazo de Hollywood. La ceremonia de su conversión se desarrolló en Isfahán, donde cambió su nombre al de Sean Christopher «Alí» Stone.

«Muchos me han dicho que ya no van a trabajar conmigo y yo para ellos solo tengo una simple oración. No hay otro Dios que Dios y Mohammed es su mensajero. La conversión al islam no es abandonar el cristianismo o el judaísmo, en los que nací», dice Sean Stone, cuyo padre es de origen judío y su madre cristiana.

Licenciado en Historia, colaborador de su padre en diversos trabajos cinematográficos y director de algunos documentales, el joven Stone confesó a un periódico de Estados Unidos: «Estoy seguro que con mi decisión he molestado a mucha gente poderosa en Hollywood. Soy judío de sangre, bautizado cristiano y acepto las enseñanzas de Cristo. He leído la Biblia, el Antiguo Testamento y el Corán. Creo en un solo Dios que se llame Alá o Jehová o como quieras. Yo me considero un judío, cristiano y musulmán».

Su padre ha dicho en un comunicado que acepta la decisión. «Mi padre entiende que estoy tratando de crear un puente para crear paz en el mundo». Sorprendido por la reacción de muchos de sus compañeros, Sean explicó que ahora que estrena su película de terror «Graystone», sentirá todavía más el odio de la industria: «Jamás pensé que fuera a ser vilipendiado de esta manera. Me tratan como si fuera un criminal por haber aceptado el islam. No sabía que existiera tanta fobia por esta religión. Es ridículo. No me importa que me critiquen, estoy abierto a crear un debate sobre religión. Merece la pena».

¿Qué pasa con los hijos?

Muchos en Hollywood empiezan a preguntarse qué ocurre con los hijos de los famosos. Que Sean Stone y su decisión de convertirse al islam y apoyar públicamente al presidente de Irán, Mahmoud Ahmadinejad, no sorprende en Los Ángeles, donde Oliver Stone es considerado un antiamericano por apoyar a los presidentes de Cuba y Venezuela.

Los valores de los padres de Hollywood están en entredicho. Coincide por ejemplo con la muerte de Whitney Houston, a quien se acusa de enseñar a su hija Bobbi Kristina el mundo de las drogas y el alcohol.

Esta semana también la Policía detuvo al hijo de Hugh Hefner por asaltar a su novia, una conejita de PlayBoy. Marston, de 25 años, creció viendo cómo su padre degradaba a las mujeres. Al final, muchos, como el cronista Robert Shapiro, están sugiriendo que la notoriedad de los padres acaba afectando a los hijos. Según Shapiro, los retoños de las celebridades son las primeras víctimas de la fama.