Consecuencias de atentados en París: Síntomas de la enfermedad francesa

ESTI PELED PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Es un hecho que los asesinos en París eran muy musulmanes y pueden señalarse una serie de aspectos. Francia traicionó a sus judíos al aceptar a millones de inmigrantes de una cultura hostil a ellos. La invitación a Abbas fue una duplicidad.

Por Manfred Gerstenfeld

Tras la reciente oleada de atentados en París, el Presidente francés François Hollande dijo que “estos fanáticos no tienen nada que ver con la religión musulmana.” Las palabras de Hollande encubren el problema en lugar de aclararlo, pero su declaración fue sólo uno de los muchos eventos que merecen atención a raíz de los asesinatos de París.

Hollande no es el único líder que encubre la identidad musulmana de los criminales. En un discurso sobre el Estado Islámico, el Presidente Barack Obama dijo que el grupo “no es “islámico” y añadió: “Ninguna religión tolera la matanza de inocentes”.

Esta perspectiva sobre el movimiento musulmán extremista es compartida por el Primer Ministro británico, David Cameron, quien declaró: “Se jactan de su brutalidad. Afirman que hacen esto en el nombre del Islam. Esa es una tontería. El Islam es una religión de paz. Ellos no son musulmanes, sino monstruos.”

El hecho de que los asesinos de París eran muy musulmanes se hizo aún más evidente cuando una variedad de organizaciones y líderes religiosos musulmanes en el Medio Oriente se identificaron con ellos. Ni siquiera necesitamos ir tan lejos. Muchos alumnos musulmanes en Francia se negaron a guardar un minuto de silencio por las víctimas.

Los eventos asesinos en París y las reacciones posteriores son aún demasiado frescas para evaluarse. Sin embargo, ya hay una serie de aspectos que se pueden destacar, aunque merecen una mayor investigación.

En primer lugar, ambos atentados tienen distintos motivos Los periodistas de Charlie Hebdo fueron asesinados por lo que escribieron y dibujaron; los judíos en el supermercado murieron por lo que eran.

Hay un gran simbolismo en el hecho de que las cuatro víctimas judías fueron sepultadas en Israel, pese a que son franceses. Francia los ha engañado. La traición comenzó hace mucho tiempo. Francia dio entrada a millones de inmigrantes de una cultura hostil a los judíos. Argelia, Túnez y Marruecos están entre los diez países más antisemitas en el mundo, según un estudio realizado por la ADL en 2014 sobre el antisemitismo clásico en el mundo.

La situación en Francia habría sido radicalmente diferente con 500,000 musulmanes en el país en lugar de una población de cinco millones. El número de yihadistas se habría contado en centenares y no en miles, como es ahora el caso. Esta política de inmigración selectiva de grandes poblaciones antisemitas podría considerarse una forma inconsciente de antisemitismo de estado. Para empeorar las cosas, sólo una parte de estas personas se han integrado a la población francesa en general y miles de ellos se han radicalizado.

En los últimos días se observaron actos con significado simbólico. Se puede entender que el viernes por la tarde las autoridades francesas solicitaron a propietarios judíos que cierren sus negociosos, ya que no quedaba claro si había otros asesinos musulmanes en el área. Sin embargo, la última vez que las autoridades cerraron la Gran Sinagoga de París antes del viernes por la noche fue durante la ocupación alemana. Muchos notaron su simbolismo.

El único precedente vagamente similar del cierre de sinagogas en sábado debido a amenazas se registró en 2010 cuando se cancelaron los rezos en la pequeña sinagoga conservadora de la ciudad de Weesp, en Holanda. En este caso, la decisión fue tomada por los líderes de la comunidad luego de una amenaza. En 2006, la comunidad judía de Malmö, Suecia trasladó los rezos a un lugar secreto.

La marcha de unidad en París, su mensaje positivo y el número de participantes fue impresionante. Sin embargo, al invitar a una variedad de dictadores que limitan activamente la libertad de prensa, el evento se corrompió. La Organización de Periodistas sin Fronteras señaló la participación de líderes de Egipto, Rusia, Turquía, Argelia y los Emiratos Árabes Unidos. Todos estos son países en donde se limita la libertad de prensa, entre una variedad de libertades derechos humanos.

La invitación de Hollande al presidente de la Autoridad Palestina Mahmoud Abbas es una ofensa directa a los israelíes y al pueblo judío. Abbas ha glorificado masivamente el asesinato de civiles, israelíes, judíos, y otros. Abbas no debería haber sido invitado por los franceses, para empezar, y desde luego no deberían haberlo colocado en la primera fila. Éste es un síntoma de la duplicidad recurrente de Francia.

Se ha dicho que Netanyahu ofendió a los franceses luego de instar a todos los judíos franceses a emigrar a Israel. Al referirse a judíos que son ciudadanos franceses nativos, la forma en que se hizo inicialmente careció de tacto; el llamado a la aliyá debería haberse expresado de otra manera.

Netanyahu también pudo haber señalado ante los líderes franceses que Israel ha pasado por épocas en las que cada restaurante se ha visto obligado a contratar un guardia armado. Hoy en día, la policía o los soldados protegen las escuelas judías en Francia para que los niños puedan ir a clase. No sería una exageración tomar las mismas medidas para proteger a los restaurantes judíos así como las principales tiendas en Francia.

El Ministro del Interior de Francia Bernard Cazeneuve llegó a la escena del crimen cuando la toma de rehenes en el supermercado kosher se conoció públicamente. Durante la Operación Margen Protector del verano pasado, éste mismo ministro dijo que de no ser miembro del gobierno, habría participado en manifestaciones pro Gaza. En otras palabras, Cazeneuve habría apoyado el movimiento islamo-nazi Hamas.

Por último, Francia apoyó recientemente la resolución de la ONU respaldada por Jordania para el establecimiento de un Estado palestino. El embajador de Francia ante las Naciones Unidas Francois Delattre, afirmó que había una “necesidad urgente de actuar”. Y añadió: “Nuestros esfuerzos no deben detenerse aquí. Es nuestra responsabilidad intentarlo de nuevo, antes de que sea demasiado tarde.”

Hubiese sido mucho más veraz que Delattre admita que Francia votó a favor de la resolución para recompensar a los musulmanes que habían votado masivamente por Hollande en las últimas elecciones presidenciales.

Con respecto a “la necesidad urgente de actuar,” los franceses deben tomar medidas en casa contra la extrema violencia perpetuada por elementos criminales de su población musulmana. Esta necesidad parece ser mucho más urgente que su participación en el Medio Oriente mientras ayuda a agravar el conflicto palestino-israelí aún más.

Traducido desde Arutz 7 para Agencia de Noticias Enlace Judío México