La casa Hermann Historica, de Múnich, anuncia la venta de prendas de jerarcas nazis para el próximo sábado.

ENRIQUE MÜLLER

La casa de subastas Hermann Historica de Múnich tiene el próximo sábado, 18 de junio, una cita con el capítulo más trágico de la historia de Alemania y que puede deleitar a los nostálgicos del III Reich, pero también a los museos y coleccionistas privados interesados en adquirir objetos o prendas que pertenecieron a los más famosos líderes nazis. Gracias a una herencia dejada por el médico estadounidense John K. Lattimer, que fue el responsable de vigilar el estado de salud de los jerarcas del nazismo que comparecieron en el famoso juicio de Núremberg, la casa subastará prendas personales de Hermann Göring y Adolf Hitler, un acontecimiento que estará cerrado a la prensa.

Una de las primicias de la subasta son unos calzoncillos de seda de Göring, una exquisita prenda con las iniciales bordadas en color azul H.G. “El talle es de 114 centímetros y la seda es muy fina, ligera y de color claro”, señala el catálogo que, informa, la postura mínima es de 500 euros.

En la subasta, anunciada ayer viernes, también se ofrecerá un pijama del mariscal de aire y segundo en la jerarquía nazi, un par de zapatos de color negro (desde 2,000 euros) y el pastillero que contenía la cápsula de cianuro con la que se suicidó Göring poco antes de ser ejecutado, una rara reliquia macabra que se ofrecerá al público por 25.000 euros.

No son las únicas prendas que saldrán a subasta el 18 de junio en Múnich. La casa Hermann Histórica, que en el pasado subastó una cartera del Zar Alejandro I y un abrigo del Káiser Franz Joseph, ofrecerá a sus clientes una corbata y una pajarita de Hitler, calcetines del dictador, así como radiografías del Führer e informes médicos realizados después del atentado del 20 de julio de 1944.

Vestidos de Eva Braun

La subasta también ofrecerá escritos de Heinrich Himmler, el fanático jefe de las SS, vestidos de Eva Braun y un trozo de cuerda que fue utilizada para ahorcar a los jerarcas condenados a muerte en Núremberg. 14 jefes nazis murieron así después de ser encontrados culpables de haber cometido crímenes de guerra, crímenes contra la paz y crímenes contra la humanidad.

Todas las prendas de la subasta, que ha sido anunciada por la casa de Múnich como “Hitler y los lideres nazis. Una mirada única al interior del mal”, provienen de la colección que poseía Lattimer, un médico que sentía una rara pasión por coleccionar objetos extravagantes, como un trozo de pene que supuestamente era de Napoleón y una camisa manchada de sangre que portaba Abraham Lincoln cuando fue asesinado.

Como responsable de la atención médica que recibían los jerarcas nazis en Núremberg, Lattimer no solo tuvo acceso directo a los líderes, sino también era el encargado de certificar la muerte de los nazis que fueron ahorcados, como fue el caso de Göring. Pero ni la casa de subasta, ni la familia del médico, que falleció en 2007, han querido explicar la forma cómo el médico pudo hacerse con los objetos personales que serán subastados. En cambio, el dueño de la casa de subastas, Wolfgang Hermann, eligió las páginas del periódico Frankfurter Allgemeine Zeitung para justificar la venta. “Esta colección ofrece a los museos y coleccionistas la posibilidad de adquirir piezas muy interesantes que documentan la historia del nacionalsocialismo y de la segunda guerra mundial”.

Es posible, pero el comerciante no pudo o no quiso explicar la importancia que pueden tener los calzoncillos de seda de Göring o los calcetines de Hitler para documentar de forma científica la perversa historia del III Reich. Hermann es más preciso cuando se refiere a la subasta del trozo de cuerda que fue utilizada para ahorcar a los mandatarios nazis. “Es una pieza histórica”.

Fuente:elpais.com