ROB WOOLARD
Bajo la mirada de la estatua del Cristo Redentor, 78.000 personas en el estadio Maracaná se reúnen para presenciar la fiesta de cuatro horas
SILVIA SCHNESSEL PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Los Juegos de Río fueron inaugurados con un espectáculo extravagante encabezado por la supermodelo Gisele Bundchen el viernes cuando una fatídica concentración Olímpica dio paso a un ambiente de fiesta cargado de energía en el fabuloso estadio Maracaná.
El corredor de maratón Vanderlei Cordeiro encendió el pebetero después de un exuberante espectáculo de toques culturales brasileños e impresionante pirotecnia – y una compulsiva explosión de samba.
Cordeiro fue el único medallista olímpico latinoamericano en maratón, que fue atacado por un espectador mientras lideraba la maratón de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 al final de la carrera.
En un recordatorio de la lamentable situación política y económica de Brasil, el presidente interino Michel Temer recibió abucheos y burlas antes de declarar inaugurados los primeros Juegos Olímpicos de Sudamérica.
Temer asumió el cargo cuando comenzó el proceso de destitución contra la presidente, Dilma Rousseff, cuyos partidarios lo acusan de conspirar contra la líder suspendida.
A pesar de la corriente subterránea de resentimiento, y las protestas contra los Juegos sólo horas antes, los espíritus estaban altos entre los miles de atletas, artistas, aficionados y funcionarios en el Maracaná con un aforo de 78.000 personas.
“El sueño olímpico es ahora una realidad maravillosa. El mejor lugar del mundo es aquí y ahora”, dijo el jefe del comité organizador, Carlos Nuzman, seguido de un caluroso aplauso.
El cantante brasileño Paulinho da Viola cantó el himno nacional que dio comienzo al elaborado espectáculo de luces láser y bailes destacando la historia de Brasil y elevándose como potencia emergente.
Bundchen de Brasil se pavoneó por la arena al icónico estilo “Chica de Ipanema” antes de que Grecia, sede de los antiguos Juegos Olímpicos, acompañara la salida del colorido desfile de los atletas.
Participaron más de 10.000 atletas de 207 equipos, con las mayores ovaciones reservadas para el equipo de refugiados especialmente formado y el alegre contingente brasileño.
La portadora de la bandera de Irán fue Zahra Nemati en silla de ruedas, su primera abanderada femenina que competirá en tiro con arco a pesar de estar paralizada en ambas piernas.
Cada atleta fue obsequiado con una semilla y un bloque de tierra para que puedan plantar un árbol originario de Brasil, que en última instancia forme un “Bosque de Atletas” compuesto de 207 especies diferentes – una para cada delegación.
“Este es el momento de la ‘cidade maravilhosa’ (ciudad maravillosa)”, dijo el presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach.
“Estos Primeros Juegos Olímpicos de América del Sur irán desde Brasil a todo el mundo”.
Los grupos de tribus indígenas y bailes fueron algunos de los aspectos más destacados de un espectáculo bajo en tecnología, pero alto en invención.
Pero el tema abrumador de la noche fue la protección del medio ambiente.
Una secuencia comenzó representando el nacimiento de la vida, culminando en el surgimiento de un entrelazamiento verde de las hojas en el suelo del estadio que representaba la selva tropical del Amazonas.
Indígenas brasileños a continuación, presentaron bailes nativos antes de crear enormes “Ocas” o chozas de los nativos en el centro del escenario.
Eso dio paso a una fiesta exuberante, alegre, que abarcaba impresionantemente diversas tradiciones musicales y culturales de Brasil.
La atmósfera de celebración siguió a protestas previas, cuando cerca de 3.000 personas con pancartas que decían “¡No a los Juegos Olímpicos!” se reunieron fuera de un hotel de lujo donde se alojan muchos atletas.
Brasil ha gastado más de $ 10 millones de dólares en nueva infraestructura y la preparación para los Juegos en un momento de crisis económica.
Los miles de millones prodigados en los Juegos han enfurecido a muchos brasileños ya que el país se enfrenta a una economía fracasada y enormes problemas sociales.
La ceremonia del viernes levanta el telón en una fiesta deportiva de más de dos semanas con superestrellas como Michael Phelps y Usain Bolt, así como miles más que competirán por 2.102 medallas hasta el 21 de agosto.
La primera medalla de oro será otorgada el sábado en tiro y todos los ojos estarán fijados en la estrella de la natación estadounidense Phelps, el atleta olímpico más condecorado de la historia, cuando regrese a la piscina la primera semana.
El atletismo verá a Bolt de Jamaica dispuesto a defender sus coronas de 100m, 200m y 4x100m al llevarse las tres en los terceros Juegos consecutivos.
Gimnasia, por su parte, podría descubrir a una nueva heroína estrella adolescente de Estados Unidos Simone Biles, mientras el rugby y el golf retornan al programa olímpico después de brechas de 92 y 112 años, respectivamente.
Fuente: The Times of Israel – Traducción: Silvia Schnessel – © EnlaceJudíoMéxico