Menos de dos semanas después de un devastador ataque terrorista islámico en Londres, que se cobró la vida de ocho personas, una importante organización musulmana británica está animando a sus partidarios a llevar las banderas de Hezbolá en una manifestación anti-Israel en la capital británica este domingo 18 de junio.

BEN COHEN

La Comisión Islámica de Derechos Humanos (IHRC), que mantiene estrechos vínculos con el régimen iraní, dijo que las banderas de organizaciones prohibidas en el Reino Unido por terrorismo no estarían permitidas en su marcha anual de “Al-Quds” (Jerusalem). Pero, agregó en un sitio web de asesoramiento, “pueden traer una bandera de Hezbolá para mostrar apoyo al ala política de Hezbolá. Esto se debe a que el ala política de Hezbolá no es una organización proscrita”.

Hezbolá usa solamente una bandera, que contiene la imagen de un rifle de asalto en su centro y una inscripción árabe que dice: “El Partido de Alá será triunfante – La Resistencia Islámica en el Líbano”.

Hezbolá – un grupo terrorista chiita iraní que opera fuera de Líbano y ha enviado miles de combatientes a Siria e Irak – fue proscripto por el ex gobierno Laborista en el Reino Unido en 2008. En ese momento, el Ministerio del Interior británico describió la decisión como “Un mensaje claro de que condenamos la violencia de Hezbolá y el apoyo al terrorismo”. Sin embargo, la orden no se extendió a las llamadas “actividades políticas y sociales” de Hezbolá.

Hezbolá no reconoce la distinción entre sus alas “militar” y “política” que prevalece en el Reino Unido y en gran parte de la Unión Europea. En 2013, su líder, Hassan Nasrala, ridiculizó la idea de dos alas distintas en un discurso de Beirut, diciéndole sarcasticamente a su público: “Propondré la designación de miembros del ala militar del partido en el futuro gobierno”.

La participación de Hezbolá en el terrorismo internacional, estrechamente coordinada con sus pagadores iraníes, se remonta al menos a octubre de 1983, cuando la organización hizo explotar el cuartel de los Marines de Estados Unidos en Beirut, matando a 241 militares estadounidenses.

Hezbolá también llevó a cabo el ataque de marzo de 1992 de la Embajada de Israel en Buenos Aires, en el que murieron 29 personas. En julio de 1994, agentes de Hezbolá condujeron un camión lleno de gasolina al centro judío de la AMIA en la capital argentina, matando a 85 personas en lo que sigue siendo el peor acto de terror antisemita desde la Segunda Guerra Mundial.

Más recientemente, miles de combatientes de Hezbolá han estado sirviendo en Siria como parte de los esfuerzos iraníes y rusos para estabilizar el régimen del presidente Bashar al-Assad. Los activistas sirios de los derechos humanos han reunido evidencia creciente de crímenes de guerra en Siria cometidos por unidades de Hezbolá, que incluyen violaciones masivas de mujeres. Hezbolá sigue siendo una seria amenaza para Israel, así, con más de 100.000 misiles dirigidos al Estado judío.

Los judíos británicos – respaldados por la Junta de Diputados del Reino Unido, la Federación Sionista y el Consejo de Liderazgo Judío – han estado recolectando firmas en una petición al alcalde de Londres Sadiq Khan instándole a prohibir la marcha del domingo. Un portavoz del Community Security Trust, que coordina la seguridad de las instituciones judías del Reino Unido, dijo a la Jewish Chronicle: “Hemos sostenido desde hace mucho tiempo que es profundamente inaceptable que se lleven banderas de Hezbolá aquí en el Reino Unido, especialmente en esta efusión anual de odio”.

“El propio Hezbolá no hace distinción entre sus alas políticas y militares y la bandera incluye un rifle de asalto, por lo que no hay duda de lo que está pasando aquí”, señaló el portavoz de la CST.

El viernes por la tarde, Khan respondió a la petición aclarando que “El Alcalde no tiene el poder de prohibir una marcha en Londres”.

Khan dijo que su oficina había asegurado que la Policía Metropolitana “aprecia plenamente el impacto potencial de esta marcha en las comunidades de Londres y está monitoreando la situación de cerca”.

“Como siempre, habrá un enfoque de tolerancia cero a los crímenes de odio, incluyendo el antisemitismo”, dijo Khan.

El Día de Al-Quds fue iniciado por el último líder iraní Ayatola Ruhola Jomeini en 1979 después de la toma islámica del poder durante la revolución ese mismo año. Un reciente informe de la Liga Anti-Difamación (ADL) sobre el evento anual señaló que su observación en Irán está “marcada por una odiosa demostración de sentimiento anti-Israel y antisemita, manifestada en manifestaciones organizadas por el gobierno y otras actividades”.

“Antes del Día de Al Quds en 2016, el liderazgo de Irán reunió al país”, informó el informe de la ADL. “El líder supremo Ayatola Jamenei llamó a su conmemoración y apoyo a los palestinos oprimidos un importante deber religioso”.

La marcha de la IHRC en Londres suele tener lugar el fin de semana después del Día de Al Quds, que cae el último viernes del mes sagrado musulmán del Ramadán. Los oradores que participaron en las manifestaciones de la IHRC han incluido al actual líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, quien se dirigió a una multitud cuando aún era un parlamentario de segunda fila en 2012 y fue fotografiado sonriendo junto a una bandera de Hezbolá. Al final de su discurso, Corbyn pidió que el Reino Unido imponga un embargo de armas a Israel.

Un portavoz de la oficina de Corbyn dijo que el líder laborista no tiene “planes” de asistir a la marcha de este domingo, que culminará fuera de la embajada estadounidense en el centro de Londres.

Mientras tanto, se espera que cientos de manifestantes movilizados por organizaciones judías mantengan una posición contraria cercana bajo la bandera “Stand Against Hate”. (Contra el Odio)

Fuente: The Algemeiner – Traducción: Silvia Schnessel – Reproducción autorizada con la mención siguiente: © EnlaceJudíoMéxico