Enlace Judío México.- Un grupo de ex soldados israelíes llamado Calibre 3 dirige un curso de “antiterrorismo” para turistas, enseñándoles “lo que hacemos aquí en Israel para combatir el terrorismo”. Mientras tanto, los palestinos acusan a la compañía de beneficiarse del conflicto y explotar los temores sobre el terrorismo.

Los extranjeros gritan “fuego, fuego, fuego” antes de disparar sus armas automáticas mientras los instructores israelíes miran, pero no es entrenamiento militar.

Los 20 o más turistas judíos de América del Sur están en un curso “antiterrorista” dirigido por ex soldados israelíes en Judea y Samaria.

El objetivo de la formación no es enseñarles a disparar”, dice Eitan Cohen, uno de los instructores, al grupo, “sino hacerle entender lo que hacemos aquí en Israel para combatir el terrorismo“.

La atracción turística ofrece una opción inusual para los visitantes que vienen a ver los sitios sagrados de Jerusalem o a flotar en el Mar Muerto.

Pero si bien puede ser estimulante o instructivo para algunos, otros lo consideran ofensivo, acusando a la compañía de beneficiarse de la ocupación israelí del territorio palestino y los temores de “terrorismo”.

La compañía se llama Calibre 3, situada cerca del asentamiento israelí de Efrat al sur de Jerusalem, y comenzó en 2003 como un campo de entrenamiento para el personal de seguridad profesional, como la policía.

Los instructores, incluidos los ex soldados que sirvieron en unidades de élite, utilizan la experiencia adquirida a través de los diversos conflictos de Israel.

Desde 2009, también se ha convertido en una atracción para los turistas a los que se les enseña a manejar armas, participar en paintball o aprender Krav Magá, el método de autodefensa con boxeo y artes marciales desarrollado por el ejército israelí.

Ellos pagan algo más de $ 100 por participar.

Un programa ve a los turistas tropezar en un “ataque terrorista” en un mercado simulado con frutas de plástico y puestos de madera.

Cohen, de 41 años, les escribe y les dice que siempre estén alertas en una multitud.

Tiene apariencia de Rambo: trajes, gafas de sol posadas en la frente, rifle colgado sobre el hombro y una pistola en el cinturón. El sitio web de Calibre 3 dice que es un ex francotirador y miembro de unidades de policía de élite.

“Voy a mostrarles los valores de los soldados en el ejército israelí y cómo luchamos contra los terroristas”, dice a los turistas, que toman fotos de él con banderas israelíes en el fondo.

“Crear miedo ”
Dan Cohen, de 49 años, vino de Caracas con su familia de vacaciones a Israel y decidió agregar el entrenamiento a su itinerario.

Mientras sus hijos juegan al paintball cerca, él y su esposa Lili escuchan atentamente al instructor antes de un curso intensivo en el manejo de armas automáticas y disparando a un globo pegado a un objetivo.

Vinimos aquí pensando que íbamos a hacer algo completamente diferente”, dice, añadiendo que querían aprender “a disparar” y “reaccionar en una situación terrorista, Dios no lo quiera“.

Pero lo que realmente aprendimos es cómo los soldados toman decisiones rápidas y entienden lo que está mal y lo que es correcto en estas situaciones, y lo difícil que es entender“.

Pero algunos palestinos dicen que ven a la compañía como otro insulto.

Mohammed Burjieh, maestro de 38 años de edad en la vecina localidad de Massara, cercado de Efrat por la polémica valla de seguridad israelí, acusa a Calibre 3 de explotar los temores sobre el “terrorismo”.

“Los colonos que dirigen esta empresa crean miedo (de los palestinos) entre los turistas, así que lo propagan cuando regresan a sus países”, dice.

Cerca de 25.000 turistas, principalmente estadounidenses, pero también chinos, canadienses y sudamericanos, participaron en la capacitación el año pasado, según la firma.

Otro instructor, Yoav Fleishman, que llevaba una camiseta negra con las palabras “Instructor de Combate”, dice que “estamos explicando a los turistas las dificultades de esta guerra, que es muy diferente de la guerra clásica”.

Después de que los turistas completan el entrenamiento de dos horas, Cohen proporciona una evaluación, pero también un mensaje.

“Debemos proteger a los civiles mientras mantenemos nuestros valores morales”, dice entre aplausos

NOTA DEL TRADUCTOR
Lo realmente importante de este tipo de actividad no es sólo brindar los aspectos técnicos de defensa, sino preparar a la persona para distinguir los peligros reales de los imaginarios y la aptitud mental para saber aplicar los conocimientos teóricos adquiridos en el momento preciso.

Fuente: Ynetnews – Traducción: Eduardo Duschkin – Reproducción autorizada con la mención: ©EnlaceJudíoMéxico