Enlace Judío México.- El jueves 08 de marzo se celebró el Día Internacional de la Mujer, una fecha que finalmente eligió la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para conmemorar la lucha de la mujer por su participación en la sociedad y en su desarrollo íntegro como persona.

El Día de la Mujer de instauró oficialmente en la década de los setenta, cuando la ONU declaró que 1975 fuera el Año Internacional de la Mujer, y posteriormente, llamó a los Estados miembro a establecer un día como Día Internacional por los Derechos de la Mujer y la Paz Internacional.

Sin embargo, la celebración data de inicios del siglo XX cuando en 1910, un centenar de mujeres representantes de 17 países se reunieron en Dinamarca para dialogar sobre los avances para que sus derechos fueran reconocidos.

A este evento en Europa, le siguió la noticia del incendio en la fábrica Triangle Shirtwais de Nueva York en donde aproximadamente unas 140 trabajadoras perdieron la vida, la mayoría de origen judío. Este suceso recriminó la falta de medidas de seguridad para las empleadas, lo que se convirtió en una nueva demanda para el sexo femenino.

Sin embargo, la elección del 8 de marzo para ser declarado el Día Internacional de la Mujer tiene su lugar en la Revolución Rusa, cuando las mujeres consiguieron su derecho al voto ante la abdicación del Zar Nicolás II durante la Revolución de Febrero.

Aunque en aquellos años, Rusia ocupaba el calendario juliano, y este evento tuvo lugar un 23 de enero, para el calendario gregoriano que ya se utilizaba en mayor parte de occidente, fue un 8 de marzo.

Estas son las seis mujeres que cambiaron el rumbo de la historia de México.

Sor Juana Inés de la Cruz (1651-1695).

La primera gran mujer que cobró fama por su labor desde el México de la Colonia fue sin duda Juana Inés de Asbaje y Ramírez de Santillana, mejor conocida como Sor Juana Inés de la Cruz. Considerada la mayor figura de las letras hispanoamericanas del siglo XVII, la escritora se enfrentó a los estigmas de la época, al punto que se tenía que vestir de hombre para poder estudiar. En su obra plasmó el mito sobre la diferencia entre los hombres y mujeres, así como una sátira contra los hombres.

Josefa Ortiz de Domínguez (1768-1829).

La Corregidora fue la más famosa de las mujeres revolucionarias, considerada por la historia como la Madre de la Patria. Nacida en Valladolid, hoy Morelia, doña Josefa alertó a los insurgentes sobre el conocimiento de la Corona Española de los planes de Independencia, por lo que gracias a ella, el movimiento inició antes de lo planeado, pero justo a tiempo para poder salvar la causa revolucionaria.

Leona Vicario (1789-1842).

La historia de México es injusta con Leona Vicario, esposa del insurgente Andrés Quintana Roo, pues su labor en el grupo de Los Guadalupes, un organismo de inteligencia que informaba de acciones y planes de la corona a los independentistas, fue clave para la Independencia. Leona Vicario envió correos desde el inicio de la Independencia hasta 1813, cuando una de sus cartas fue interceptada y su tarea descubierta.

Frida Kahlo (1907-1954).

Aunque realmente, la pintora Frida Kahlo y su obra trascendieron luego de su prematura muerte, su nombre se ha colocado como uno de los más importantes que ha dado México para el mundo. Autora de más de 200 obras, fue la esposa de otro pintor, Diego Rivera, con quien conquistó el mundo de la cultura y el arte al punto de ser reconocida por otros artistas como Pablo Picasso, André Bretón y Marcel Duchamp.

Katy Jurado (1924-2002).

María Cristina Jurado García, nombre real de Katy Jurado, fue la primera actriz mexicana que dio el gran salto a Hollywood en la década de los cincuenta cuando pudo adentrarse en esta industria gracias al cineasta Budd Boetticher. Su belleza exótica la hizo una habitual de las películas de la época, además de que fue la primera ganadora hispanoamericana del Globo de Oro. De igual forma, fue la primera en ser nominada al Premio Oscar.

Soraya Jiménez (1977-2013).

Los Juegos Olímpicos de Sídney 2000 pasaron a la historia de México con la medalla de oro que ganó la especialista en halterofilia Soraya Jiménez, cuando tenía 23 años de edad, la primera presea dorada que ganaba una mujer para el país. Desafortunadamente, su carrera se vino abajo tras esta hazaña al pinto que no logró calificarse al siguiente ciclo olímpico. Murió de un infarto en 2013 en su domicilio, a la edad de 35 años de edad.

 

 

Con información de: sexenio.com.mx