Enlace Judío México.- La respuesta militar en Siria está justificada, pero Trump necesita una estrategia más grande.

EDITORIAL THE WALL STREET JOURNAL

El ataque militar de Estados Unidos, Francia y el Reino Unido el viernes por la noche fue una respuesta necesaria a lo que el Presidente Trump llamó apropiadamente “barbarie” al describir el uso de armas químicas por parte del régimen de Bashar Assad en Siria. La pregunta que se presenta es si este es otro intento único de castigar a Assad o si presagia una estrategia más grande para contrarrestar el intento por parte del eje Assad-Rusia-Irán de dominar el Medio Oriente.

“El propósito de nuestras acciones esta noche es establecer una fuerte disuasión contra la producción, difusión y uso de armas químicas. Establecer esta disuasión es un interés vital de seguridad nacional de Estados Unidos,” dijo el Presidente Trump en un discurso a la nación. Él tiene razón, pero un ataque único no tendrá el efecto disuasorio que él quiere. Assad, y por sobre todo sus patrones iraníes y rusos, tienen que saber que ellos pagarán un precio por apoyar el comportamiento de Assad.

La extensión de la medida punitiva no estaba clara para cuando fuimos a impresión, aunque parecía ser más extensa que el ataque hace un año que atacó una única base aérea siria. Trump dijo el viernes por la noche que el ataque del año pasado eliminó al 20% de la fuerza aérea de Siria, pero el resto se recuperó rápidamente y está funcionando nuevamente.

Trump insistió el viernes en preguntar a Irán y Rusia: “¿Qué tipo de nación quiere estar asociada con el asesinato en masa de hombres, mujeres y niños inocentes?“ Una buena pregunta, pero esperamos que el Presidente no espere que el Kremlin o Teherán presten atención basados en un único ataque con misiles. Ellos tienen demasiado invertido en Assad como para retirarse a menos que crean que pagarán un precio más grande.

Los informadores de la administración sugirieron que la coalición está preparada para más ataques aéreos si es necesario, y si no Vladimir Putin puede descansar tranquilo. El eje de Assad está contando con que Estados Unidos tenga poder de permanencia limitado. Los aliados tendrán que estar en guardia por si Putin e Irán buscan oportunidades para contraatacar desde el Mediterráneo al Báltico. Pero es posible que ellos griten solamente en protesta y esperen a que Estados Unidos pierda interés. Para disuadir verdaderamente a la barbarie y proteger los intereses estadounidenses, Trump necesitará una estrategia más grande que un ataque militar.

 

 

 

 

 

Fuente: The Wall Street Journal
Traducido por Marcela Lubczanski para Enlace Judío México.