Dinamarca aprueba la prohibición del burka

Copenhagen (Foto de Pixabay)

Enlace Judío México.- El Parlamento danés ha aprobado la prohibición de los velos islámicos de cara completa en los espacios públicos. La nueva ley, patrocinada por el gobierno de centro derecha de Dinamarca, y respaldada por los socialdemócratas y el Partido Popular Danés, fue aprobada el 31 de mayo por 75 votos contra 30.

SOEREN KERN

A partir del 1 de agosto, cualquier persona que se encuentre llevando una burka (que cubre toda la cara) o un niqab (que cubre toda la cara excepto los ojos) en público en Dinamarca estará sujeta a una multa de 1.000 coronas danesas (€ 135); los delincuentes reincidentes podrían ser multados con 10.000 coronas danesas.

Además, cualquier persona que fuerce o amenace a otra para usar prendas que cubran la cara podría ser multada o enfrentar hasta dos años de prisión.

Dinamarca se convierte en el sexto país europeo en promulgar dicha prohibición, después de Francia, Bélgica, Países Bajos, Bulgaria y Austria. Baviera en Alemania, Cataluña en España y Ticino en Suiza también han impuesto prohibiciones regionales de burka, mientras que Noruega ha presentado una ley para prohibir burkas en las escuelas públicas. Las prohibiciones aparentemente buscan restringir la expresión proliferante del Islam político en Europa.

La prohibición del burka danés fue propuesta por primera vez por el Partido Popular de Dinamarca en 2009. El diputado Martin Henriksen dijo que los burkas y los niqabs “son incompatibles con la cultura danesa“. Añadió:

Han sido necesarios casi diez años para convencer a una mayoría en el parlamento de que debemos prohibir el burka y el niqab en espacios públicos. Ahora que la prohibición ha sido aprobada, el Parlamento debería, en opinión del Partido Popular Danés, continuar trabajando en medidas contra la islamización de Dinamarca“.

En una declaración, la ministra de Justicia, Søren Pape Poulsen, dijo:

Mantener la cara oculta en encuentros con otras personas en espacios públicos es incompatible con los valores de la sociedad danesa y una falta de respeto a la comunidad. Debemos cuidarnos de mostrar respeto por nuestra comunidad y los valores que nos unen. Con la prohibición de cubrirnos la cara trazamos una línea en la arena y subrayamos que en Dinamarca nos mostramos mutuamente confianza y respeto al encontrarnos cara a cara“.

Amnistía Internacional dijo que la nueva ley era una “violación discriminatoria de los derechos de las mujeres”. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (CEDH), sin embargo, dos veces ha dictaminado que las prohibiciones del burka son legales.

En julio de 2017, por ejemplo, el ECHR confirmó por unanimidad la prohibición belga de llevar burka en los espacios públicos. Dijo que el gobierno respondía “a una práctica que consideraba incompatible, en la sociedad belga, con la comunicación social y, en general, con el establecimiento de relaciones humanas, que eran indispensables para la vida en la sociedad … esenciales para garantizar el funcionamiento de una sociedad democrática“.

En octubre de 2010, Francia se convirtió en el primer país europeo en prohibir los velos islámicos en público. El entonces primer ministro François Fillon dijo que la prohibición tenía como objetivo “reafirmar solemnemente los valores de la república” y argumentó que “ocultar la cara … coloca a las personas involucradas en una posición de exclusión e inferioridad incompatible con los principios de la libertad, igualdad y dignidad humana afirmadas por la República Francesa“.

El presidente de la época, Nicolas Sarkozy, dijo que el burka es “una nueva forma de esclavitud que no será bienvenida en la República Francesa“. Jacques Myard, un ex parlamentario conservador que apoyó la prohibición, dijo que el burka fue un “shock” para la cultura francesa: “La cara es la dignidad de una persona. La cara es su pasaporte. Cuando me niegas verte, soy una víctima“.

Un ciudadano francés de origen pakistaní de 24 años, sin nombre, cuestionó la nueva ley. Sin embargo, en julio de 2014, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (CEDH) confirmó la prohibición del burka en Francia, aceptando el argumento del gobierno francés de que alentaba a los ciudadanos a “vivir juntos“.

En noviembre de 2016, el parlamento de los Países Bajos votó abrumadoramente a favor de una prohibición parcial de los velos islámicos que cubrían la cara en algunos espacios públicos, como escuelas, hospitales, edificios gubernamentales y en transporte público.

En octubre de 2016, el parlamento de Bulgaria prohibió los velos faciales en público. Quienes no cumplen con la prohibición enfrentan multas de hasta 1.500 levs (€ 770; $ 900), así como la suspensión de los beneficios de asistencia social.

En octubre de 2017, una prohibición de burka entró en vigor en Austria. La llamada Ley contra el velo que ocultoa la cara (Anti-Gesichtsverhüllungsgesetz) también prohíbe que la cara se cubra en público con bufandas, máscaras y pintura para la cara. Quienes violen la ley están sujetos a una multa de € 150 ($ 175).

De vuelta en Dinamarca, los musulmanes saludaron la nueva ley con desafío: una docena de mujeres vestidas con burkas y niqabs se sentaron en la galería de visitantes del parlamento en Copenhague. “Bajo ninguna circunstancia comprometeré mis propios principios“, dijo una de ellas.

La ministra de Justicia, Søren Pape Poulsen, dijo que “algunas personas no quieren ser parte de la sociedad danesa y quieren crear sociedades paralelas con sus propias normas y reglas“. Esto, dijo, demostraba la necesidad de la prohibición del burka: “Queremos vivir en una sociedad donde podamos vernos los ojos. Donde nos vemos las caras en una democracia abierta. Como daneses, esta es la forma en que debemos estar juntos“.

Soeren Kern es miembro principal del Gatestone Institute con sede en Nueva York.

Fuente: Gatestone Institute – Traducción: Silvia Schnessel – Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío

Silvia Schnessel: Silvia Schnessel es corresponsal de Enlace Judío en España. Docente y traductora, maneja el español, el hebreo, el francés, el inglés y el catalán. Es amante del periodismo, del sionismo y de Israel.