Enlace Judío México e Israel.- Probablemente has escuchado que el estrés es malo para la salud e incluso puede contribuir a enfermedades graves como las enfermedades del corazón.

El estrés no solo causa problemas, también puede empeorar los problemas de salud que ya tenemos.

“Nuestra piel y nuestro cerebro están definitivamente conectados”.

Hablamos con expertos en el Centro Médico Cedars-Sinai para comprender por qué el estrés puede agravar e intensificar condiciones de salud preexistentes, desde problemas de piel hasta la diabetes e hipertensión, y qué puede hacer al respecto.

La conexión mente-cuerpo.

“Nuestra piel y nuestro cerebro están definitivamente conectados”, afirma la dermatóloga Dra. Ohara Aivaz.

“Cuando el cuerpo libera hormonas de estrés, como el cortisol, nuestra piel detecta estas hormonas y crea una oleada de proteínas inflamatorias. Esto puede exacerbar una variedad de enfermedades de la piel”.

De acuerdo a la Dra. Aivaz, las afecciones cutáneas preexistentes, como urticaria, herpes labial, acné, psoriasis y dermatitis, pueden prolongarse e intensificarse con el estrés.

“Una herida puede sanar en un tiempo más largo si un paciente está psicológicamente afectado”, dice la Dra. Aivaz.

Estrés y estilo de vida.

Las elecciones saludables son más difíciles cuando estamos sobre estresados, y esto también puede empeorar las enfermedades existentes.

“La diabetes y la hipertensión son ejemplos de enfermedades crónicas que requieren constante atención; la dieta, el estilo de vida y la adherencia al medicamento, que pueden ser saboteadas por el estrés”, comenta la doctora Maria Scremin.

“El estrés dificulta seguir una dieta o una rutina de ejercicios, y con frecuencia distrae a las personas de sus regímenes de medicamentos diarios”.

De acuerdo con la Dra. Scremin, el estrés puede desencadenar otras afecciones, como insomnio, sub o sobre-comer, irritabilidad y depresión, que luego empeoran las enfermedades y las enfermedades crónicas.

“El estrés puede prolongar ciertas enfermedades y condiciones durante años”, dice ella.

Tanto la Dra. Scremin como la Dra. Aivaz ofrecen a sus pacientes estrategias de manejo del estrés para mejorar su salud.

“Les digo a mis pacientes que seleccionen metas alcanzables, incluso si solo caminas 15 minutos al día”, dice la Dra. Scremin. “Socializar con amigos y fortalecer amistades también puede reducir el estrés”. Algunos pacientes no pueden evitar las situaciones estresantes en sus vidas, lo que hace que el cuidado personal sea aún más importante.

“Si es difícil evitar una situación estresante, la yoga, el ejercicio, la acupuntura y la terapia de masaje pueden ayudar”, dice la Dra. Aivaz. “Si es necesario se debe hacer una evaluación psiquiátrica para identificar cuadros de depresión o ansiedad”.

La comunicación es importante.

Además de modificar el estilo de vida, simplemente hablar sobre el estrés de nuestras vidas puede ayudar. Una relación de confianza y abierta entre el paciente y el médico es importante para que el tratamiento sea lo más exitoso posible.

 

 

 

Fuente:el news semanal