Enlace Judío México e Israel.- El Nuevo Colegio Israelita de Monterrey, preocupado por dar una enseñanza donde los estándares sobrepasen los requeridos académicamente, se esmera por ofrecer una educación integral que envuelva valores universales así como la necesidad de mantener un orden de convivencia y tolerancia entre los hombres.

THELMA KIRSCH

Es por este motivo que se presentó el 30 de mayo un proyecto nuevo y original dentro de una asignatura de investigación: Ciudadanía global con un enfoque titulado “Diversidad Cultural “y que se basa en diferentes temas de actualidad que los niños deben de investigar, comprender y asimilar teniéndolos como base para su formación.

El proyecto estuvo a cargo de los alumnos de primaria. Cada grupo tenía un mensaje que transmitir a través del arte, ya fuera música y danza, tecnología y los enlaces visuales.

Dicho trabajo se presentó en inglés, hebreo y español.

Los temas tratados fueron: la no violencia, la migración y la paz mundial además de elaborar un museo con todo lo que pudieron adquirir para reflejar estos conceptos.

Otra de las actividades presentadas en dicho evento fue el dar a conocer a personajes que han sido básicos para impulsar y fomentar la paz mundial: Shimon Peres, Itzjak Rabin, Ghandi, La Madre Teresa de Calcuta y Malala.

Con esta presentación nos guían hacia un mundo más justo y tolerante.

Pero esto no fue todo.

Tocaron los corazones de los asistentes con una historia que lleva a la reflexión y a recordar el valor que cada niño posee y el hecho de que también cada uno de ellos tiene la fuerza para cambiar los valores, y en su momento, al mundo.

Todo esto utilizando la historia de Sadako Sasaki. Una niña japonesa que vivió a sus dos años la explosión de la bomba atómica en Hiroshima (el 6 de agosto de 1945). Sobrevivió a esta experiencia, pero a los nueve años de edad enfermó de leucemia. Para mitigar sus dolores durante la fase terminal de la enfermedad, su padre le dijo que si era capaz de doblar mil grullas, utilizando la técnica del origami, un deseo se le cumpliría. (La grulla es un ave majestuosa que se asocia con la vida y es extremadamente leal con su compañero. El ave es fuerte, agraciada y hermosa. A causa de su gran importancia, los japoneses creen que si una persona hace mil grullas puede cumplir su deseo más preciado).

Sadako dedicó su tiempo a doblar papel, cualquier papel que encontraba a la mano, ya que en esa época no era fácil conseguirlo, además de que su precio era elevado. Ella sabía que la condición económica de sus padres era muy precaria y por esto no podía recibir mejores medicinas a pesar de los dolores que sufría, por lo que dedicaba su tiempo en construir estas preciosas aves de papel y pretender que aún le quedaba fuerza y optimismo para su futuro.

Logró realizar las mil grullas, pidió su deseo más preciado dedicado a sus padres: que desaparecieran sus deudas y que ella pudiese sanar y regresar a su hogar.

Continuó con su menester de mantenerse ocupada con el doblado del papel y logró otras seiscientas grullas antes de fallecer.

La historia de Sadako ha sido filmada en distintas películas, ha sido contada en documentales y libros, pero poco es lo que ha llegado hasta nosotros.

Sin embargo, su fortaleza y dedicación, además de su bondad, se convirtió en un símbolo, y el crear grullas con trozos de papel es una metáfora de lo que una persona puede alcanzar a tan corta edad.

Es por todo esto el interés de los coordinadores de tan bella labor. Que los niños conocieran más de cerca esta historia y la replicasen doblando entre todos: maestros y familias, las grullas que se expusieron durante la presentación, recordando la necesidad de paz en este mundo caótico en el que vivimos.

Los amigos de Sadako pidieron donativos por todo el mundo y con estos se construyó un monumento que lleva el nombre de la niña fallecida en 1955. En este monumento podemos ver a una niña con una grulla y en su base reza la leyenda: “Cualquiera tiene el poder de luchar para alcanzar la paz”.

Cualquier visitante, cualquier persona que se acerque al monumento o que desee poner un grano de arena para buscar un poco de tranquilidad espiritual, puede dejar una grulla de origami a los pies del monumento recordando la grandeza de ese corazón infantil.

 

 

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