Enlace Judío México e Israel.- Una fuerte victoria del partido Ley y Justicia en Polonia podría permitirle proceder con reformas judiciales que corren el riesgo de socavar la independencia judicial y el estado de derecho
El partido derechista gobernante de Polonia tomó la delantera en las elecciones generales del domingo, mostró una encuesta de salida, ampliando su mayoría gracias a una serie de medidas de bienestar junto con ataques contra los derechos LGBT y los valores occidentales.
El Partido de la Ley y la Justicia (PiS) obtuvo el 43.6 por ciento de los votos para 239 escaños en el parlamento, superando a la oposición centrista de la Coalición Cívica (KO) con el 27.4% de apoyo (130 escaños) y una coalición de izquierda que obtuvo el 11.9% (43 escaños), según una encuesta de salida de Ipsos para las tres principales estaciones de televisión de Polonia.
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“Tenemos cuatro años de duro trabajo por delante. Polonia debe cambiar más y debe cambiar para mejor“, dijo Jaroslaw Kaczynski, líder de PiS, a sus seguidores en su sede de Varsovia.
“Espero que los [resultados oficiales] de mañana confirmen nuestro éxito“, dijo Kaczynski.
Los expertos han advertido que una fuerte victoria de PiS significa que podría proceder con reformas judiciales que corren el riesgo de socavar la independencia judicial y el estado de derecho, algo que probablemente avive aún más el conflicto con la Unión Europea.
En el cargo desde 2015, el PiS de Kaczynski se ha centrado en los votantes rurales más pobres, uniendo los valores familiares con una nueva asignación popular por hijos, exenciones de impuestos para personas de bajos ingresos y aumentos a las pensiones y el salario mínimo.
Considerado ampliamente como el líder de facto de Polonia, Kaczynski también ha avivado una profunda división social atacando a las minorías sexuales y rechazando los valores liberales occidentales, todo con la bendición tácita de la influyente Iglesia Católica de Polonia que domina a los votantes rurales.
“El PiS finalmente se está ocupando de los miembros más débiles y vulnerables de la sociedad“, dijo a AFP Kasia, una psicóloga de 40 años que trabaja en un refugio para mujeres, después de votar en Varsovia. “Lo he visto de primera mano en el trabajo“.
Kaczynski se encuentra entre varios líderes populistas en la Unión Europea que favorecen una mayor soberanía nacional sobre el federalismo defendido por las potencias francesas y alemanas.
El PiS ha buscado el favor de la administración Trump. Polonia ha considerado durante mucho tiempo a los Estados Unidos como el principal garante de su seguridad dentro de la alianza de la OTAN y como un baluarte contra Rusia, su patrón de la era soviética con quien las tensiones siguen siendo altas.
“En política exterior, el PiS está defendiendo a Polonia, no meramente aceptando ciegamente lo que Alemania o Francia quieren“, dijo Michal, un electricista de Varsovia de 34 años después de votar.
Respaldado por el presidente saliente del Consejo de la UE, Donald Tusk, de Polonia y el archirrival de Kaczynski en la escena doméstica, la oposición Coalición Cívica (KO) se ha basado principalmente en los votantes urbanos molestos por la política divisiva del PiS, las reformas judiciales que amenazan el estado de derecho, escándalos de soborno y monopolización de los medios públicos.
“Voté por la democracia, para salvaguardar el futuro de mis nietos“, dijo Jadwiga Sperska, una pensionista trabajadora de 64 años y partidaria de KO, frente a un colegio electoral de Varsovia.
“La dirección del gobierno actual podría sacarnos de la UE“, agregó.
Condenando el impulso anti-LGBT y cerrando los lazos de la iglesia, pero compartiendo los objetivos de bienestar del PiS, la izquierda regresó al parlamento después de una pausa de cuatro años.
“Apoyo una sociedad abierta y tolerante, sin agresiones y con uniones del mismo sexo“, dijo Monika Pronkiewicz, una trabajadora del sector público de 31 años y votante de izquierda en Varsovia.
En otros partidos, la alianza PSL agricultores/Kukiz 15 obtuvo el 9,6% de los votos para 34 escaños y la Confederación, un partido libertario de extrema derecha, capturó el 6,4% de apoyo para 13 escaños, mostró la encuesta de salida de Ipsos.
Kaczynski ha aprovechado una reacción populista contra las élites liberales, similar a las tendencias en Europa occidental y los Estados Unidos.
La apuesta de su partido por construir un estado de bienestar atrae a los polacos que se sintieron abandonados en medio del crecimiento explosivo y el impulso sin restricciones del libre mercado después de la caída del comunismo en 1989.
Los analistas sugieren que los desembolsos sociales han convertido al PiS en un “partido de teflón“, amortiguando su reputación en medio de una serie de escándalos de injerto que involucran a miembros de alto rango.
El KO había prometido revertir las reformas judiciales del PiS, que según la UE amenazan la independencia judicial, pero por lo demás ofreció poco a los votantes.
Los críticos atribuyen un fuerte crecimiento económico bajo el PiS a factores externos favorables.
Según un informe de la OCDE, un mercado laboral ajustado en el país de la UE de 38 millones de personas lo convirtió en el principal destino de trabajadores migrantes temporales del mundo en 2017.
Los resultados oficiales preliminares deben presentarse el lunes.
Ley y Justicia ha hecho una fuerte campaña contra las reclamaciones de restitución del Holocausto judío, lo que ha llevado a los líderes judíos a advertir que el debate se había vuelto antisemita. En el mes de mayo, miles de nacionalistas polacos marcharon a la embajada de los Estados Unidos para protestar por la presión de los Estados Unidos sobre Polonia para compensar a los judíos cuyas familias perdieron propiedades durante el Holocausto. Parecía ser una de las manifestaciones callejeras antijudías más grandes de los últimos tiempos.
Bajo el PiS, Israel y Polonia también han visto tensiones diplomáticas por el rechazo de los funcionarios polacos de cualquier culpabilidad por parte de la nación por las atrocidades antisemitas del pasado, particularmente durante el Holocausto. El año pasado, el gobierno introdujo una controvertida ley que prohíbe culpar a la nación polaca de los crímenes nazis (aunque la legislación se suavizó luego de la presión israelí para eliminar las medidas punitivas).
Los últimos meses han visto un aumento dramático en los informes de antisemitismo polaco en línea, en los medios y en la política local.
El mes pasado, la oficina del presidente polaco, Andrzej Duda, negó un informe de que el presidente había culpado a Israel por los recientes incidentes antisemitas en el país en una reunión con funcionarios judíos estadounidenses.
Fuente: The Times of Israel / Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío
