Enlace Judío México e Israel.- Los Jaguim se toman con mucha seriedad, a la vez que con alegría, en la comunidad regiomontana, ya que forman parte integral de la vida de cada uno de nosotros como judíos.

THELMA KIRSCH

En Rosh Hashaná y Yom Kipur vimos cómo nuestro Shul se engalanó con la llegada de los familiares que vinieron a pasar las fiestas en ésta, su ciudad.

Es un gozo ver a todos los hombres vestir su Talit con orgullo, ver a la comunidad reunida llevando el rezo con atención y cariño, a los niños acercarse a sus padres para comprender o integrarse en los salones donde se prepararon actividades especiales para ellos.

La oportunidad para desearnos uno al otro “Un buen año”, para comunicar lo mejor que se puede esperar le suceda a un ser querido: “Jatimá Tovah”.

Escuchar el Shofar en comunidad durante Rosh Hashaná es un momento invaluable. Y estar cerca de los padres, los hijos y los amigos de toda la vida.

Oír al Jazán entonar cada una de las plegarias que desde la niñez pertenecen a nuestra historia y a la de nuestro pueblo, implica un paso más hacia el conocimiento de las Mitzvot y el judaísmo.

Un especial agradecimiento al Rabino Pinchas Ben Mordechai Ha Levi, y a su esposa Renana.

El Rabino, atento en la Sinagoga y dirigiendo a los jóvenes y a todos los que le necesitaban, a la vez que tocando el Shofar para todos y llevando también las plegarias, además de darnos un significativo mensaje tanto en Rosh Hashaná como en Yom Kipur.

Días antes de las fiestas, el Rabino y su esposa se dedicaron a enseñarnos, mostrarnos, explicarnos y guiarnos a través de las diferentes partes del rezo. No hay palabras para agradecer su entrega e interés para con los miembros de la comunidad.

Le damos las gracias de todo corazón al Sr. Jacobo Wengrowsky que con entusiasmo y camarería nos ayudó a seguir los rezos y nos compartió historias, anécdotas y razones para continuar leyendo y sintiendo las palabras del Majzor.

Al presidente de la comunidad León Dachner le agradecemos el interés para que todo saliera de la mejor manera, desde la seguridad en las instalaciones hasta los detalles que este año se incorporaron a la Sinagoga.

Al personal del Centro Israelita de Monterrey, nuestras felicitaciones por su entusiasmo, su colaboración y el esfuerzo realizando. La elaboración de los calendarios y las agendas para este nuevo año, la venta de las kartisei-brajá para reunir fondos para la escuela y enviando información a todos los socios para que conozcan los horarios de los rezos y todo lo necesario para estas fechas.

La Sinagoga hermosamente decorada daba la bienvenida a los socios y sus invitados.

Nuevamente gracias a todos por hacer de estas fiestas un año más, un motivo de valor y vivencia inigualable.

La comunidad de Monterrey invita a todas las comunidades de Latinoamérica a visitarnos y formar nuevos lazos con los que aquí nacimos y vivimos.

¡Jatimá Tová!