Enlace Judío México e Israel – Seguro para su uso incluso con la presencia cercana de personas y sin generar ozono, un sistema moderno para erradicar el SARS-CoV-2 de las superficies fue implementado en un hospital en Israel.

El Centro Médico Mayanei Hayeshua de la ciudad de Bnei Brak instaló un sistema a base de luz ultravioleta para acabar con todo coronavirus presente en alguna superficie de sitios donde se tratan pacientes contagiados, de acuerdo a The Jerusalem Post.

El sistema emite una específica longitud de onda que es lo suficientemente potente como para eliminar el coronavirus en una habitación en alrededor de media hora, no es dañina para la piel y es segura para usar cerca de pacientes, incluso aquellos con padecimientos pulmonares.

Fue desarrollado por el emprendedor israelí Eldad Peri y un equipo médico dirigido por el Dr. Boris Orkin, con la colaboración de un grupo de físicos que asistieron en el desarrollo técnico del sistema.

“Las luces ultravioleta se han utilizado durante años para purificar y desinfectar quirófanos en Israel y en todo el mundo, sin embargo, en 2009, las autoridades sanitarias estadounidenses emitieron una advertencia de que algunas de las luces que se utilizaban creaban moléculas de ozono que podrían ser extremadamente peligrosas, especialmente para los pacientes con padecimientos pulmonares”, dijo Orkin. “Debido a esto, no fueron utilizados en la lucha contra el coronavirus, por temor a dañar al paciente”.

Sin embargo, de acuerdo con Orkin, “hay luces ultravioletas, con una longitud de onda específica que no crean ozono, pero son eficientes para purificar edificios y habitaciones y, por lo tanto, son extremadamente adecuadas para lidiar el virus”.

El profesor Moti Ravid de Mayanei Hayeshua señaló que el sistema usa bulbos específicos que emiten una frecuencia que no genera ozono en el aire, y como tal, son seguros para cientes con padecimientos pulmonares.

Además, estas mismas luces específicas no crean radiación dañina para la piel y los ojos. Usando el algoritmo físico, es posible instalar el sistema de luz y los productos con la longitud de onda y diferentes salidas para adaptarse a cualquier tamaño de habitación o edificio. Este tipo de sistema puede destruir el coronavirus en un período de tiempo de hasta 30 minutos sin dañar a ningún individuo”.

Peri desempeñó un papel al identificar a varios fabricantes individuales que producen estas bombillas de luz de longitud de onda poco común y específica y reclutó un equipo de físicos y profesionales médicos para desarrollar e instalar el sistema.

El sistema tenía que estar hecho a medida para el hospital y coincidir con el algoritmo físico que coincide, que calcula el tipo de estructura, longitud de onda, salida y posición óptima necesaria para garantizar la máxima eficiencia.

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