Enlace Judío México e Israel – La actriz israelí Gal Gadot no acató una norma sanitaria establecida por el gobierno israelí desde marzo pasado: la cuarentena domiciliaria obligatoria para los que lleguen al país.

La intérprete de la célebre “Mujer Maravilla” voló a Israel hace un par de semanas, pero en lugar de entrar en cuarentena domiciliaria obligatoria, como manda la ley, la familia de Gadot alquiló una casa vacacional con piscina en Arsuf y recibió a visitantes, violando con ello las normas, de acuerdo con el periódico Israel Hayom.

Si bien Gadot y los miembros de la familia que llegaron con ella el pasado 12 de junio dieron negativo para coronavirus, aún debían ingresar a la cuarentena domiciliaria obligatoria de acuerdo con las pautas.

Sin embargo, según Israel Hayom, la familia Gadot acogió a varios invitados no familiares en la casa vacacional mencionada para diferentes propósitos durante su “cuarentena”.

La casa vacacional tiene un precio de aproximadamente 870 dólares por noche y está valuada en cerca de 5.5 millones de dólares.

La violación de Gadot a las normas llamó la atención, especialmente debido a la fuerte postura que había tomado contra la violación de la cuarentena en ocasiones anteriores, escribiendo en su cuenta de Instagram en marzo que “quedarse en casa es nuestro superpoder […] no deberíamos tomarnos esto a la ligera”.

En el avión de Gadot que llegó de Los Ángeles a principios de este mes estaba el turista estadounidense Brandon Korff, quien violó la cuarentena para reunirse con su novia, la actriz israelí Yael Shelbia.  El destino de Korff fue diferente: se le deportó del país al confirmarse su violación de las normas.

Gadot y su familia, por otro lado, ciudadanos israelíes, están bajo la supervisión del Ministerio de Salud. Su cuarentena termina oficialmente mañana viernes.
A inicios de mes, un escándalo surgió en el Ministerio de Salud de Israel, cuando se reveló que uno de sus altos funcionarios, Itamar Grotto, vicedirector general de la dependencia, aprobó un permiso para que un magnate israelí no se sometiera a la cuarentena domiciliaria.

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