La afamada serie “The Mandalorian”, contiene algunas pistas de que el personaje principal “Mando”, podría seguir una parte de la tradición judía.

Para cualquiera que tenga un ojo crítico, notará que Star Wars (La Guerra de las Galaxias) tiene algunas similitudes con el judaísmo. “La fuerza”, esta energía que transmiten los seres vivos, parte fundamental de la filosofía de la saga, no es un tema nuevo sino que se ha abordado desde hace cientos de años a través de la sabiduría de grandes cabalistas.

El creador de esta increíble historia “futurista”, George Lucas, mantiene que la filosofía japonesa, fue su inspiración, sin embargo, mientras más uno profundiza en este universo, el judaísmo resalta cada vez más.

En “The Mandalorian”, la nueva serie de Star Wars en la plataforma de contenidos Disney+, parecería que el personaje principal Din Djarin maneja una ideología que no solo le permite continuar en momentos difíciles, sino que también lo obliga a responsabilizarse de eventos que cambian mundos (literalmente), en un universo que es regido por caos.

Tomando en cuenta este detalle, comienza una serie de elementos que denotan una similitud entre su estilo de vida “mandaloriano” y la tradición judía.


1. “This is the way” / La Tradición Mandaloriana.

Al comenzar la serie dos cosas quedan claras: #1 – Mando es magnífico en su trabajo como cazarecompenzas, #2 – está dispuesto a llegar hasta los confines de la tierra para llevar a cabo su misión. Ahora bien, mientras se avanza en la serie llegamos a entender que tanto su experiencia, como su dedicación a su labor, son parte de una tradición milenaria ancestral.

Mandalorian 6 - Mando se aleja del cielo

Ellos la llaman “The Way”, traducido como “el camino” o la manera y es una referencia a la creencia milenaria que comparten los mandalorianos, sobre honrar su propia tradición. Esta afirmación refuerza su creencia cada vez que afronta cualquier reto, con la idea de que el es un eslabón en la cadena de tradiciones que lo une con sus ancestros.

Recuerdo a un pueblo que mantiene sus tradiciones, no sólo como una forma de pertenencia e identidad, sino como sentido también. Claro, se llama el pueblo judío y sus tradiciones siguen vivas hasta hoy.


2. Exposito – Huérfanos

Al encontrarse con Baby Yoda, Mando toma la responsabilidad de cuidarlo, ya que con sus palabras “está indefenso y no tiene familia”. A lo que “la forjadora”, la mandaloriana que construye las armaduras, le informa que de acuerdo a la tradición o “al camino”, es su responsabilidad cuidarlo y regresarlo a un lugar en donde pueda llenar sus necesidades.

Incluso después de darse cuenta que el niño podría formar parte de un enemigo ancestral mandaloriano: los jedi’s.

Mandalorian 2 - Mando de la serie Mandalorian de Disney+ acaricia a Baby Yoda en su carreola

La tradición judía tiene reglas muy claras sobre los huérfanos y viudas, haciendo hincapié en su vulnerabilidad por no tener a nadie y ordenando a los miembros de la comunidad correspondiente a hacerse cargo de estos elementos de la sociedad. La tradición judía refuerza nuestro respeto por la vida, mostrando de forma clara la importancia de cuidar con especial dedicación a aquellos miembros más vulnerables, ya sea dándoles de comer o regresándolos a su comunidad.

Al igual que el mandaloriano hace en la serie.


4. Juzgar para bien

Es increíble la capacidad que tiene Mando para confiar en nuevos clientes, sabiendo cuántas veces hemos visto que lo han traicionado. Sin embargo, en varios casos, Mando siempre confía en la persona que lo contrata. Incluso no se ve que la persona que lo contrata tenga las mejores intenciones, Mando no deja que eso nuble su juicio. Siempre intenta ayudar, aunque a veces se eso lo lleve a situaciones complicadas.

Otra cosa que lo define es su fe. Incluso cuando tiene que llevar a Baby Yoda a lugares que no conoce, espera encontrar a las personas correctas y nunca se rinde si falla. Siempre hay una manera de seguir el camino del mandaloriano, aunque la situación se vea un tanto oscura.


5. Recordar para mejorar el presente

El recuerdo de su identidad lo lleva en la armadura, pero no es una cosa que lo detiene, sino que le ayuda a enfrentar los problemas con los emblemas que porta.

Mandalorian 3 - Mando con un sable se escapa de los stormtroopers mientras ellos caen a mitad de una batalla

Así Mando no busca matar o destruir, sino respetar las culturas con las que se encuentra para honrar su propia tradición. Una tradición que lleva puesta como armadura y que siempre ayuda lo ayuda a que sus recuerdos sean combustible y no un ancla.


6. Mandalorianos: Una raza que perdura

Después de miles de años, de tener guerras tanto internas como externas, estar esparcidos por la galaxia y de ser respetados por las demás razas a lo largo del universo, los mandalorianos continúan existiendo debido a su código.

Para cualquiera que indague aunque sea un poco en la filosofía de Star Wars, notará que los mandalorianos son respetados por ser increíbles cazarecompenzas. Cuando aparecen, las personas los tratan con respeto, pues conocen la extensión de sus habilidades y la formalidad de sus compromisos.

Así como el pueblo judío, los mandalorianos, son una raza que ha existido desde hace miles de años antes y que sus orígenes datan a tiempos más antiguos de no solo el imperio, sino también de la Républica. Y de acuerdo a lo que sabemos, aunque haya pocos, continuarán por muchos años en ese universo de galaxias muy lejanas – siempre y cuando puedan pegarse a su tradición.


7. Puedes nacer mandaloriano o te puedes convertir

El pueblo judío se presenta como una incógnita para muchos que apenas lo encuentran, muchas veces por las tradiciones que nos definen como pueblo, otras veces por nuestra alimentación, así como por ser una anomalía en la historia universal – una anomalía que todavía existe. Sin embargo, la incógnita se encuentra en nuestra necedad por no realizar proselitismo.

De acuerdo a la tradición judía, existen dos formas de ser parte del pueblo judío: nacer judío o realizar un proceso de conversión. Se sabe que la primera conlleva una responsabilidad innata que muchos no eligen, es decir un camino difícil por ser diferente. Aunque la segunda forma, es decir la conversión es mucho más complicada. Requiere un compromiso consciente, una fuerte voluntad de cambiar la vida completa de las personas, para que puedan seguir la tradición de la mejor forma posible.

Con el pueblo mandaloriano el proceso es similar. No te puedes llamar mandaloriano si no tienes una armadura, armas representativas y ademanes similiares. Y mucho más importante, debes de seguir la tradición. Sin embargo, no hay tal cosa como un mandaloriano a medias. O naciste dentro de la tradición o simplemente haces un pacto con el pueblo mandaloriano y te comprometes a respetar sus leyes. Nadie es mandaloriano así nada más, su proceso de conversión y entrenamiento es tan fuerte, que no todos lo pasan.

El judaísmo también funciona de la misma forma: Tanto la identidad como la tradición van de la mano y las dos dependen de la capacidad del neófito para comprometerse.


8. La importancia de la palabra

“Cueste lo que cueste.” – Responde el mandaloriano a la responsabilidad de llevar al expósito con los jedi y aunque parecería una respuesta genérica, realmente no lo es.

Mandalorian 1 - Disney - Dos mandalorianos hablando, junto a Baby Yoda

Pocos notan lo importante que es la palabra para él. Algo que se entiende de forma clara al final de la segunda temporada, cuando intentan convencerlo de matar a Ashoka Tano, la padawan de Skywalker.

Apenas la encuentra, le dice que le pidieron asesinarla, pero que “no se comprometió a hacerlo”, pues para los mandalorianos, como para el pueblo judío, la palabra conlleva un compromiso y su peso no es algo que debería ser tomado a la ligera.


9. El dinero no lo es todo

Eliminado! Mando siempre está viendo lo importante Agregado: Mando siempre pone el foco en salvar la mayor cantidad de vidas posible, incluso si eso significa perder algunos créditos.

Vimos el estado en que queda su nave cuando Mando trata de llevar a un ser anfibio junto con sus huevecillos, solamente para obtener información sobre el paradero de los jedi’s. Sacrifica su propia nave, no reclama los créditos y lleva a Baby Yoda a su destino, un ser que le ha costado mucho más dinero mantener a salvo, que dejarlo ir a manos del imperio.

En la tradición hebrea, el dinero va después de lo esencial – proteger la vida de los más vulnerables y ayudar a acompletar al mundo.


10. La vida va primero

Tal como se ve cuando ayuda a los bárbaros del desierto de Tatooine a acabar con la amenaza del gusano de arena gigante que ataca a su pueblo constantemente. Incluso se enfoca en primero poner a salvo a su compañero (quien tiene una armadura mandaloriana que no es suya, lo que es increíblemente molesto para él), para poder atraer al monstruo y salvar a todos de la amenaza.

Pero el ejemplo más icónico es el del otro protagonista de la serie: Baby Yoda. La cantidad de veces que el mandalorian arriesga su reputación, sus posesiones materiales y hasta su propio cuello para salvarlo y llevarlo con quien pueda cuidarlo, son incontables.

Mandalorian 3 - Mando se aleja de su nave, sosteniendo a Baby Yoda entre sus brazos, con el sol de Tatooine de fondo - Star Wars

Mando sigue el código mandaloriano, y aunque es claramente distinto a la tradición hebrea, por su facultad conflictiva y propensa a la guerra, se nota el respeto que él mismo tiene por la vida de sus adversarios. Aalcanzar el objetivo que su misión demanda, no implica sacrificar la vida de los que se encuentran en su camino. Muestra clara en el capítulo en el que le salva la vida a un enemigo que lo traicionó, dejándolo en manos de la nueva república.

Sabemos que el mandaloriano tiene las habilidades para acabar con la vida de varios que se cruzan por su camino y no obstante, toma una decisión consciente de no matarlos. Esta es la muestra de un personaje lo suficientemente dedicado a mantener un código, sin importar lo difícil que esto resulte.


Hemos visto lo que pasa cuando otros mandalorianos se separan de este código, como Jango y Bobba Fett, poniendo sus intereses egoístas sobre la tradición y también hemos visto lo que esto conlleva: uno termina sin cabeza y el otro en las fauces de un monstruo. Si uno no respeta la vida en general, lo más posible es que terminen junto a otros que tampoco respeten la suya.

Din Djarin es un ejemplo claro de alguien dedicado a mantener un código que trasciende su ego, independientemente si eso implica dificultades y complicaciones que podrían desaparecer facilmente, si uno decidiera dejar la tradición. Sin embargo, Mando sabe lo importante que son estas reglas, más en un universo caótico que parece regirse por la fuerza bruta y la dominación.

El pueblo judío comparte esta idea. La necesidad de recordar las enseñanzas milenarias de sus ancestros, para entregarle un poco de justicia a un mundo caótico y traer a la realidad aunque sea, un poco de justicia.


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