Enlace Judío México e Israel – El 14 de febrero, originalmente una festividad del santoral católico-romano que se ha secularizado por completo, está a punto de llegar, y con él todos los mensajes románticos y —por qué no— cursis, envueltos en una feroz tradición consumista en la que parece que el único verdadero sentido es comprar y comprar, y en donde lo único que parece que se celebra es el mercado. ¿Cómo se llegó a esto?

Irving Gatell nos explica cómo han evolucionado varias cosas. No sólo el concepto de amor, sino las prácticas sociales relativas al matrimonio y el papel de la religión.

En medio, como el eje que lo ha transformado todo en un lento proceso que se remonta a unos siete siglos, está esa revolución burguesa que llevó a la instauración del capitalismo industrial y, como consecuencia directa de este, un nuevo modo de entender, producir y usar la riqueza. Algo que al paso
del tiempo también afecto el modo en que entendemos el amor y lo ejercemos.

Y sí: todo esto tiene que ver con los nuevos significados que le damos al Día del Amor y la Amistad.

Pero, sobre todo, con los nuevos retos —especialmente después de un año tan difícil como lo fue 2020, y de otro año como 2021 que no parece que vaya a ser más sencillo— para demostrar el amor que podemos tener por nuestros semejantes.


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