Enlace Judío – Desde los últimos meses la lucha por aplicarse la vacuna se ha convertido en un continuo tema de conversación. A algunos les queda claro que hay que vacunarse cuanto antes; muchos otros tienen sus dudas sobre los efectos secundarios a largo plazo y prefieren esperar.

Pero mientras la polémica sobre la vacuna se desarrolla sin tener final, la compañía SaNotize, fundada por una científica israelí, concluyó sus ensayos científicos para ofrecer al mundo entero un spray nasal, sin duda algo que nadie esperaba.

 

Este producto, que comenzó recientemente su producción en Israel, está sorprendiendo al asegurar un 99% de eficacia para eliminar el coronavirus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad COVID-19.

Gilly Regev, bioquímica y cofundadora de SaNotize, explicó que el spray se fabricará en Canadá y tendrá el nombre de Enovid. Su componente principal es el óxido nítrico, gran aliado para este propósito.

En varias entrevistas para varios medios de comunicación la Dra. Regev ha comentado: “Esperamos que nuestro spray nasal salve muchas vidas en países que aún esperan la vacuna. Tendrá un precio accesible y puede ser usado para prevención, para proteger de una infección viral respiratoria”.

Gilly Regev también aseguró que las posibles nuevas variantes del coronavirus no provocarán que el spray sea menos efectivo.

Esta podría ser una gran noticia para la población joven del mundo entero, los que todavía se encuentran a meses de distancia de obtener su turno para la aplicación de una vacuna contra COVID-19.

El Ministerio de Salud de Israel aprobó su venta, Nueva Zelanda lo hizo también y se espera que el Reino Unido continúe, convirtiéndose estas naciones en las pioneras en sacar al mercado tan innovador producto.

De manera paralela, docenas de laboratorios israelíes continúan trabajando en la creación de una vacuna contra COVID-19 que se aplique de manera oral, es decir, en cápsulas o tabletas.

Y es que como Nadav Kidron, director ejecutivo de Oramed Pharmaceuticals lo afirma: “Tenemos la tecnología para transformar inyecciones en medicamentos orales”.

Con dicho comentario solo esperamos que la vacuna oral contra COVID-19 sea una realidad en un futuro cercano, pues estaríamos hablando de un menor costo del medicamento y una más fácil aplicación, lo que ahorraría todos los temas de logística que en estos momentos la aplicación de la vacuna está acarreando.

¿Conclusión? Sí, es una realidad, la pandemia ha representando en varios aspectos un gran golpe para toda la humanidad, sin embargo, los laboratorios han trabajado a marchas forzadas y eso se tiene que valorar.

 


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