Enlace Judío – Ayelet Shaked, la número 2 del partido Yamina, describió al primer ministro Benjamín Netanyahu y su esposa, Sara, como “dictadores” con un “ansia de poder”, y dijo que al primer ministro solo le importa su juicio por presunta corrupción, en grabaciones filtradas publicadas este lunes.

Las grabaciones fueron reveladas por el Canal 12 israelí en medio de los últimos intentos de Netanyahu para atraer a Yamina a una coalición de gobierno de derecha, antes de que el mandato con el que cuenta para ello expire mañana martes, recogió The Times of Israel.

Reportes han indicado que Shaked preferiría una coalición con Netanyahu a un gobierno de unidad con el partido centrista Yesh Atid, en el que el presidente de su lista, Naftali Bennett, fuese el primer ministro en un acuerdo de rotación de gobierno.

Pero las grabaciones del lunes revelaron que aún podría respaldar un gobierno de unidad si los esfuerzos para formar una coalición de derecha no diesen frutos.

En las grabaciones se escucha a Shaked insistiendo en que Yamina estaría “encantada” si Netanyahu logra convencer a Bezalel Smotrich, el presidente del partido de extrema derecha Hatzionut Hadatit, de unirse a un gobierno de derecha que dependa del apoyo exterior del partido islamista Ra’am.

Dijo que otra opción sería que Netanyahu le pidiera al presidente Reuven Rivlin que transfiera el mandato para tratar de conformar un gobierno a Bennett, alegando que a la presidencia de Yamina le resultaría más fácil formar un gobierno de derecha con el Likud e incluso podría incluir consigo a Benny Gantz de Kajol Laván, así como a Tikvá Jadashá de Gideon Sa’ar, quienes han prometido no unirse a un gobierno con el primer ministro.

Shaked afirmó además que si Bennett recibe el respaldo de legisladores de derecha para formar un gobierno, “no se irá a la izquierda”.

“Pero si [Netanyahu] le da el mandato a Bennett, y no podemos formar un gobierno de derecha porque Gideon y Gantz [no ceden], no estamos preparados para dirigirnos a otra elección”, dijo, especulando que el bloque de centro-izquierda podría terminar formando una coalición con la ayuda de los partidos mayoritarios-árabes si se convoca otra votación nacional.

Shaked dijo que si Yamina no logra formar un gobierno de derecha, “perseguiremos la opción [de un gobierno] con la izquierda y trataremos de persuadir a Bezalel para que venga con nosotros, para que no tengamos que depender de Ra’am .

Se pudo escuchar a Shaked desestimando las afirmaciones de Smotrich de que su oposición a un gobierno respaldado por Ra’am tiene motivaciones ideológicas.

“Este no es un asunto ideológico…. Si el Estado es importante, si él piensa que el Estado no debe depender de Abbas, entonces evitemos apoyarnos de Abbas”, dijo, afirmando que el presidente de Hatzionut Hadatit presta menos atención a los rabinos que Yamina.

Pero Shaked, de quien se rumora desde hace mucho tiempo que estaría contemplando un regreso al Likud, habiendo comenzado su carrera como empleada de Netanyahu en la Oficina del Primer Ministro, reservó sus palabras más duras para el primer ministro.

“Quiere permanecer en el poder. Tiene un ansia por el poder, él y su esposa. Son como tiranos, como dictadores. No están dispuestos a hacerse a un lado. Nosotros no somos así”, dice.

“Es cierto que él [Netanyahu] tiene que irse [del poder]. El tiene que irse. Pero le dije al Gideon: ‘Hay un país [que dirigir]. ¿Y ahora qué? ¿Vas a construir esta absurda coalición, con este y aquel [partido], porque él tiene que irse?’”, continuó, refiriéndose a las negociaciones para establecer una coalición formada por partidos de derecha, izquierda y centro opositores a Netanyahu.

“Debido a su juicio, se moverá aún más hacia la derecha”, agregó Shaked sobre Netanyahu. “Es lo opuesto a [el ex primer ministro Ariel] Sharon [quien pasó de la derecha al centro como primer ministro en medio de una investigación por corrupción en su contra]. Es cierto que lo único que le importa ahora es su juicio. Absolutamente no le importa nada más. Es cierto… todas sus consideraciones, su comportamiento, su comportamiento, todo gira en torno a su juicio”, dijo.

“Tiene miedo de pedir un indulto y un proceso de negociación de culpabilidad, porque le tiene miedo. Tiene miedo de que al final tendrá que declararse culpable y no funcionará… Después de todo, es un hombre muy paranoico. Así que tiene miedo”, dijo Shaked sobre Netanyahu, quien está siendo juzgado por presunta corrupción en tres casos.

Shaked afirmó además que si Bennett recibiera el respaldo de legisladores de derecha para formar un gobierno, “no se iría a la izquierda”. También expresó su confianza en que si Bennett obtuviera el mandato, podría llevar a Sa’ar y a Benny Gantz de Kajol Laván a un gobierno de derecha.

Shaked indicó que Yamina está buscando asegurar un acuerdo con Netanyahu mediante el cual Bennett se convierta en primer ministro durante 1.5 años, en lugar del año ofrecido por el líder del Likud, seguido de Netanyahu durante dos años y medio.

Afirmó que parte de la razón por la que Bennett se ha comprometido en negociaciones con Lapid para formar un gobierno de unidad es para convencer a Netanyahu de que venga a la mesa y detenga sus esfuerzos por lograr una quinta elección consecutiva en menos de dos años.

“[Netanyahu] entendió la situación, que Bennett tiene un gobierno alternativo [en su bolsillo], y como resultado [Netanyahu] estaba preparado para ofrecer [a Bennett] para servir primero como primer ministro durante un año y medio. De lo contrario, esta [oferta] nunca se habría producido. Nos habría llevado [directamente] a otra elección”.

Dijo que Yamina ha pagado un “precio alto” entre sus bases por esta táctica de negociación, “pero espero que si podemos formar un gobierno, entonces seremos capaces de explicar” la estrategia a sus partidarios.

También describe los supuestos intentos del Likud de intimidar al Sa’ar para que se una a un gobierno.

“El Likud se ha ofrecido a pagar las deudas [de Tikvá Jadashá]… realmente lo presionaron. Me he sentado con él [Sa’ar] durante horas. En primer lugar, tiene razón: Netanyahu debe irse. Él tiene razón en eso, pero ¿qué puedes hacer? Entonces le digo [Sa’ar], hay un marco por el cual [Netanyahu] no tendrá un año [como primer ministro al comienzo de una nueva coalición], y limitaremos su mandato [más adelante en la coalición]… Será su último mandato. Así que vive con un término más…. Gideon e Yvet [Avigdor Lieberman] realmente creen que Netanyahu es un peligro para el Estado de Israel. Están convencidos de ello… No lo creemos.

“Además, ahora que Netanyahu ha hecho Kosher a los árabes, nadie tendrá problemas para formar un gobierno con ellos. Ese es el gran daño que ya se ha hecho”, dijo Shaked, refiriéndose a la voluntad de Netanyahu de contar con el apoyo de Ra’am.

Según Maariv, los comentarios de Shaked se hicieron el lunes temprano durante una reunión con rabinos religiosos nacionales, uno de los cuales decidió grabarla.

Este lunes, a solo horas de que expire su mandato, Netanyahu dijo que estaba listo para hacerse a un lado como primer ministro y dejar que Bennett se desempeñe primero en el cargo en un acuerdo de rotación, una propuesta inmediatamente rechazada por Bennett, quien dijo en respuesta que Netanyahu simplemente no tiene el respaldo legislativo necesario.

Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío