Enlace Judío México e Israel – Durante un debate sobre el conflicto entre Israel y Hamás la periodista y autora israelí nacida en EE. UU., Caroline Glick debatió con un diplomático europeo y otros panelistas sobre la defensa de Israel frente a juicios de la opinión pública y organismos internacionales que establecen un estándar diferente para juzgar las acciones del Estado judío, cuando se defiende de los ataque de grupos terroristas como Hamás.

En una breve, pero contundente argumentación con el al embajador danés Jesper Vahr en la Conferencia Diplomática del Jerusalem Post, Glick señaló que Europa posee una obsesión con Israel y con ello objetivizan a las víctimas y demás población palestina que también es perjudicada por el conflicto.

Estas son las palabras de Caroline Glick integras.

“Debo decir que estoy un poco preocupada por las críticas da Europa. Se acusa a Europa de aplicar un doble rasero, de discriminar. Está el tema de la proporcionalidad y las víctimas civiles en el conflicto de Gaza. Permítanme aclarar esta cuestión: creo que Israel debería insistir en ser discriminado”.

“En que apliquemos un doble rasero, porque ustedes son uno de nosotros. Creo que esta actitud condescendiente hacia nosotros de que deberíamos estar contentos de que tengan un estándar diferente para Israel es realmente, disculpe, es un desprecio a nuestra inteligencia. La considero una obsesión”.

“Considero que el gran interés de Europa por el Medio Oriente, concretamente por Israel, es una obsesión, y es una obsesión que los judíos han visto en los europeos desde los tiempos de Jesús y sabemos lo que es. Esa es una cosa”.

“La otra es que, usted sabe, tenemos toda una cultura en común. Es decir, ¿en verdad? Nosotros respetamos el derecho internacional. Ustedes lo inventan”.

“Hay una resolución vinculante del Consejo de Seguridad de la ONU de 2001, el capítulo 7, 1373 que prohíbe a todos los países miembros financiar o apoyar de alguna manera a las organizaciones terroristas. Y ustedes están canalizando miles de millones de euros para reconstruir la Gaza controlada por los terroristas”.

“Esto contradice el derecho internacional vinculante que ustedes firmaron. Ahora, por otro lado, hay una ley internacional imaginaria. Una ley internacional imaginaria que dice que ustedes están obligados, obligados a sancionar proyectos judíos de Jerusalén, Judea y Samaria. No existe esa ley obligatoria. ¡Ustedes están financiando asentamientos en el Sahara Occidental! Los están financiando. Los están financiando directamente”.

“Así que, usted sabe, esto no es un doble rasero, sino un estándar singular para Israel. No se trata del derecho internacional, se trata de una necesidad obsesiva y compulsiva de meterse constantemente con el Estado judío. Y no, no quiero sentirme orgullosa de que nos miren con un estándar diferente al de nuestros vecinos. Porque ustedes no miran a nuestros vecinos como seres humanos. Lo que ustedes dicen es que son objetos.

“El único actor en toda esta región son aquellos que tratan de aniquilar. Y los únicos a los que se debe juzgar por nuestras acciones, y siempre mal, son aquellos que hacen todo lo posible, más que Europa, más que EE. UU., más que nadie para proteger la vida de los palestinos. Así que, con todo respeto, y me encantaría poder tener más respeto por Europa. Pero su trato a Israel, su estándar singular, su necesidad obsesiva y compulsiva de meterse constantemente con el Estado judío hace que sea muy difícil, muy difícil preocuparse si hacen una declaración útil como “Ah, hay que desmilitarizar Gaza””.

“La única manera, y usted lo sabe, de que Gaza se desmilitarice es si Israel vuelve a ocupar Gaza, esa es la única manera. La única organización militar aquí que no es un grupo terrorista ni que apoya al terrorismo son las FDI. Y por eso, se nos calumnia, se nos condena, se nos investiga, se nos juzga cada día – nuestros soldados, nuestros soldados son condenados por ustedes. Se les llama asesinos por proteger a nuestras familias y disculpe, pero me resulta muy difícil sentir algún respeto por este tipo de comportamiento”, concluyó.

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