Legalizar docenas de puestos de avanzada en Judea y Samaria sería “peligroso e imprudente”, dijo este miércoles el Departamento de Estado de Estados Unidos en respuesta a informes de que el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, está trabajando para hacerlo, informó The Times of Israel.
Los comentarios se produjeron después de que el Canal 12 informara durante el fin de semana que Smotrich, quien también se desempeña como ministro en el Ministerio de Defensa, está presionando para comenzar el proceso de legalización de 68 puestos de avanzada.
“Creemos que estos informes sobre directivas para apoyar puestos de avanzada ilegales en Cisjordania son peligrosos e imprudentes”, dijo el portavoz adjunto del Departamento de Estado de Estados Unidos, Vedant Patel, en una rueda de prensa diaria.
Estados Unidos se opone a los asentamientos y cree que violan el derecho internacional, añadió. Washington “seguirá instando a los funcionarios israelíes a que se abstengan de tomar medidas para financiar puestos de avanzada que durante mucho tiempo han sido ilegales según la ley israelí”, dijo el portavoz del Departamento de Estado.
Según el informe del Canal 12, Smotrich, que en su función de Ministro de Defensa tiene amplia autoridad sobre cuestiones civiles en Cisjordania, ha enviado instrucciones a varios ministerios diciéndoles que comiencen los preparativos para proporcionar una variedad de servicios públicos a dichos puestos de avanzada después de que sean legalizados.
El acuerdo de coalición entre Hatzionut Hadatit, incondicionalmente partidario de los asentamientos, que encabeza Smotrich, y el partido gobernante Likud exige que el gobierno legalice los llamados asentamientos jóvenes y los conecte a su propio suministro de electricidad y agua.
“Asentamientos jóvenes” es un eufemismo para referirse a unos 70 puestos de avanzada ilegales en Judea y Samaria, que ahora albergan a unas 25.000 personas, que se establecieron en los años 1990 y principios de los años 2000 con la asistencia de diferentes ministerios pero sin la aprobación formal del gobierno, lo que significa que son ilegales bajo la ley israelí.
En febrero de 2023, el gobierno aprobó la legalización de nueve puestos de avanzada, que eventualmente se convirtieron en 10, y al mismo tiempo hizo arreglos que, según Smotrich en ese momento, facilitarían la legalización del resto.
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