El grupo de derechos humanos advierte que el gobierno de Siria se beneficia del dinero que se cobra a las familias de las personas que el régimen hizo desaparecer.
ESTI PELED PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – En un informe publicado este miércoles, Anmistía acusa al gobierno sirio de beneficiarse del dinero que se cobra a las familias que intentan hallar a los desaparecidos y de cometer crímenes contra la humanidad.
Según el reporte, el estado sirio se beneficia de un “insidioso mercado negro en el que los familiares desesperados que averiguan el destino de sus parientes desaparecidos son cruelmente explotados por dinero en efectivo,” informó la AFP.
Amnistía dijo que cerca de 60.000 civiles han sido víctimas de dasaparición forzada desde el inicio del conflicto en Siria en marzo de 2011.
Las familias se quedan sin rastro de sus parientes e incluso son detenidas al contactar los servicios de seguridad en busca de información, añadió el informe.
Eso ha dado lugar a un mercado negro en el que los intermediarios reciben hasta decenas de miles de dólares por recopilar información acerca de los desaparecidos.
“Las desapariciones han impulsado una economía corrupta de mercado negro que comercia con el sufrimiento de las familias que han perdido a sus seres queridos,” afirmó Philip Luther, director de Amnistía para Oriente Medio y África del Norte.
“Las familias son abandonadas con grandes deudas y un enorme vacío creado por la ausencia de sus familiares.”
El autor del informe señaló que existen pruebas de que funcionarios del gobierno sirio se benefician de los fondos que reciben los intermediarios. Esto ha sido corroborado por cientos de testigos,” agregó Nicolette Boehland.
“La práctica es tan común que es difícil creer que el gobierno no es consciente de ello e incluso fomenta este fenómeno al no tomar medidas para detenerlo.”
Amnistía subrayó que algunas familias venden su propiedad o utilizan todos sus ahorros con la esperanza de hallar a sus familiares y a menudo reciben información falsa a cambio.
Luther advirtió que la campaña de desapariciones forzadas apoyada por el gobierno es un crimen a la humanidad y pidió al Consejo de Seguridad de la ONU que remita la situación en Siria a la Corte Penal Internacional.
El grupo también hizo un llamado para imponer sanciones específicas que presionen a las autoridades.
Más de 250,000 personas han muerto en Siria desde el inicio de las protestas contra el régimen del presidente Bashar Al-Assad en 2011.
Todas las partes en la cada vez más compleja guerra han sido acusadas de violaciones de derechos humanos en diversos grados de gravedad, desde detenciones arbitrarias hasta armas químicas.
Fuente: Arutz 7
Reproducción autorizada con la mención siguiente: © EnlaceJudíoMéxico