Enlace Judío México.- Obama ocultó un aplastador informe de mitos. Trump puede revelarlo al mundo.
RICHARD GOLDBERG Y JONATHAN SCHANZER
Si el Presidente Trump quiere promover la paz en el Medio Oriente, su primera medida debe ser desclasificar un informe clave del Departamento de Estado que terminaría el mito de los “refugiados” palestinos.
La Agencia de Ayuda y Obras de Naciones Unidas (UNRWA) está dedicada singularmente a la cuestión del refugiado palestino. UNRWA nombra a más de cinco millones de “refugiados” palestinos–una cifra imposible. La primera guerra árabe-israelí, en 1948, produjo 800,000 refugiados árabes palestinos. Tal vez 30,000 siguen vivos hoy, pero UNRWA ha mantenido viva la cuestión del refugiado palestino etiquetando a sus descendientes, en algunos casos tataranietos, como “refugiados”, quienes insisten en el “derecho al retorno” a las casas de sus ancestros, Israel rechaza categóricamente esta demanda.
Las operaciones de UNRWA corren contra la misión más amplia del Alto Comisionado de la O.N.U. para refugiados, la cual es reasentar a los desplazados por la guerra. La misión de UNRWA, por otro lado, mantiene ardiendo las brasas del conflicto, rehusándose a reasentar a los palestinos en países lindantes o incluso en los territorios palestinos.
Si Trump quiere que su plan de paz tenga una posibilidad, tiene que desafiar las narrativas palestinas falsas. Él hizo esto al reconocer a Jerusalén como la capital de Israel y mudando la Embajada de Estados Unidos allí. Durante décadas los líderes palestinos emitieron demandas maximalistas sobre Jerusalén. La medida de Trump envió el mensaje de que hacer la paz requiere aceptar la realidad.
Trump puede enviar el mismo mensaje desclasificando un documento. En el 2012 el Congreso ordenó al Departamento de Estado divulgar cuántos palestinos atendidos actualmente por UNRWA huyeron de la guerra árabe-israelí y cuántos son meramente sus descendientes. La administración Obama clasificó el informe, citando la seguridad nacional–como si divulgar datos de censos extranjeros fuera una amenaza para Estados Unidos.
A un año y medio en el cargo, Trump no ha revertido esta política, pero está aumentando el impulso en su contra. En abril, más de 50 miembros de la Cámara instaron al Departamento de Estado a desclasificar el informe. El Senador Marco Rubio, de Florida, ha hecho lo mismo.
Quitar la etiqueta de “refugiado” a millones de palestinos no los dañaría. En cambio, desbloquearía su potencial económico y crearía una oportunidad para la paz duradera. Tal vez ese es el motivo por el que el liderazgo palestino está combatiéndolo. Una vez que sea expuesta como un fraude la cuestión palestina. Los líderes palestinos tendrían que aprender cómo gobernar, no solamente avivar el antagonismo con Israel.
La incapacidad de los líderes palestinos de despegarse de esta historia de 70 años plantea preocupaciones reales acerca de si es posible la paz. Pero si Trump está comprometido, él puede enviar un mensaje claro a los millones que viven en los campamentos de UNRWA: Sus líderes quieren mantenerlos en la miseria, mientras que Estados Unidos quiere que ustedes prosperen. Es la medida más pro-palestina que podría tomar un presidente estadounidense.
*Jonathan Schanzer, es un ex analista en finanzas terroristas para el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, es vicepresidente en la Fundación para la Defensa de las Democracias.
*Richard Goldberg es un asesor principal en la Fundación para la Defensa de las Democracias.
Fuente: The Wall Street Journal
Traducido por Marcela Lubczanski para Enlace Judío México
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