Enlace Judío – Un estudio realizado por el Centro Médico Sheba reveló un descenso del 65 por ciento en casos graves de asma que requirieron hospitalización el año pasado, informó The Times of Israel.
El descenso se atribuye al uso cubrebocas durante la pandemia de COVID-19, que también ayudó a disminuir la propagación de la gripe.
“El uso de cubrebocas disminuye las probabilidades de padecer alergias estacionales, evitando que el polen de las flores, los árboles y la hierba entre en contacto con la nariz y la boca”, explicó la profesora Nancy Agmon-Levin, directora de la Unidad de Inmunología Clínica, Angioedemas y Alergias de Sheba.
Un primer estudio sobre el tema publicado a finales del año pasado por el Centro Médico de la Galilea y la Universidad de Bar-Ilan encontró que el 40 por ciento del personal médico que llevaba cubrebocas quirúrgicos o N95 estornudaban menos y sufrían menos congestión nasal.
El reporte sigue a la decisión de Israel de eliminar el uso de cubrebocas en áreas abiertas.
Sin embargo, el uso obligatorio de cubrebocas continuará en lugares públicos y espacios cerrados, así como en grandes aglomeraciones al aire libre, de acuerdo a las recomendaciones del Ministerio de Salud.
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