WEB ISLAM

Robert Harush, de nacionalidad israelí, ha invertido parte de su dinero en la renovación de una gran mezquita en Montereau (Francia), en un esfuerzo por promover la coexistencia.
Harush, padre de cuatro hijos, hizo una fortuna en el negocio inmobiliario europeo.

A pesar de su éxito en Europa, Harush no se olvidó de su ciudad natal y ha vuelto a Áshkelon e invertido en empresas de construcción locales. Durante los últimos 10 años ha estado dividiendo su tiempo entre Israel y Francia.

Harush fue abordado por el alcalde de Montereau, una ciudad francesa junto a París, quien le informó de sus dificultades en la financiación de la renovación de una gran Mezquita en la ciudad.
“Me dije: He aquí una oportunidad para acercar a la gente y decidí donar el dinero”, dijo Harush. “La gente estaba atónita.

¿Qué tiene que hacer un hombre judío-israelí en la renovación de una mezquita? La respuesta es sencilla: Estoy harto y cansado del odio. Una voz sensata debe surgir”.
Harush explicó que él construyó la mezquita a fin de promover la coexistencia. “No fue una empresa barata, pero lo hice con todo mi corazón”.